El nexo ‘fit’ entre la Reina Letizia, Catalina Middleton y la emperatriz Sissi
La emperatriz de Austria y Hungría era una gran apasionada del deporte.
Sissi tenía habitaciones dedicadas a la práctica del ejercicio, equipadas con aparatos especiales.
La Reina Letizia y la princesa de Gales también son deportistas entusiastas.
Están separadas por más de un siglo, pero lo cierto es que entre la que fuera una de las emperatrices de Austria más emblemáticas, Sissi, la princesa de Gales y la Reina Letizia hay algunas cuestiones en común. Todas ellas han sido o son mujeres influyentes de su época, cuyos estilismos marcan la pauta para las mujeres de su tiempo pero, además de esto, hay una cuestión que las tres tienen en común y en la que no suele repararse.
Tanto la Reina Letizia, como Catalina Middleton y la que fuera esposa del emperador Francisco José de Austria y Hungría tienen en común su pasión por el deporte. A la princesa de Gales la hemos podido ver en numerosas ocasiones a lo largo de los años demostrando su destreza en diferentes disciplinas y sabemos que es una mujer muy competitiva. De hecho, incluso en actos oficiales no ha dudado en retar al hijo mayor del rey Carlos III, tanto haciendo spinning, como practicando escalada. Además, desde pequeña ha sido una apasionada del rugby y suele salir a correr por los jardines del Palacio de Kensington o a nadar en agua fría. Algo que se nota en su espléndida figura.
La emperatriz Sissi en un retrato en blanco y negro. / Gtres
De la misma manera, la Reina Letizia también practica ejercicio de manera regular. La esposa del Rey Felipe tiene un rocódromo en el que disfrutar de la escalada, un deporte que es perfecto para los brazos y la espalda. Se ha comentado siempre que la Reina tiene unos brazos muy tonificados y una espalda musculada, que es fruto de un duro entrenamiento y una alimentación cuidada. Esta es una cuestión que doña Letizia también lleva a rajatabla, pues se sabe que sigue una dieta estricta y que se cuida mucho.
La princesa de Gales montando en bicicleta. / Gtres
La que fuera emperatriz de Austria no solo cuidaba su alimentación mucho y seguía dietas estrictas, sino que se sabe que practicaba deportes como la esgrima o la equitación de manera recurrente. A Sissi le encantaba montar a caballo, pero también salir a dar largos paseos por el campo, donde se sentía muy cómoda y tranquila. Asimismo, y aunque era algo inusual en la época, la emperatriz hizo equipar sus habitaciones privadas con una serie de aparatos de gimnasia que le permitían hacer ejercicio y mantenerse en forma.
La emperatriz, que medía 1,72 y pesaba 50 kilos, era conocida por su cintura de avispa, que mantenía gracias a dietas estrictas y ejercicios continuos. Sissi practicaba el ayuno intermitente y prefería una dieta proteica en la que apenas tenían cabida las verduras y la fruta, más allá de las naranjas. Muchos de sus ejercicios estaban basados en las rutinas que hacían los artistas de circo y practicaba con aros, espalderas y otros elementos que no solo le permitían adquirir fuerza y resistencia, sino también agilidad. Algunos de los elementos que usaba han llegado incluso hasta nuestros días, como las anillas de las que se solía colgar.