Marius Borg, hijo de Mette-Marit, relacionado con narcotráfico y terrorismo
El caso del hijo mayor de la princesa Mette-Marit de Noruega da un nuevo giro y ahora apunta al narcotráfico y al terrorismo
Marius Borg ya se enfrentaba a 42 delitos relacionados con violencia y abuso sexual, pero cada vez vamos conociendo más detalles
Marius Borg, hijo de la princesa Mette-Marit, vuelve a estar en el foco de la polémica. A pocos meses de la celebración del juicio, que tendrá lugar en febrero del año que viene, siguen saliendo detalles que pueden empañar todavía más su imagen. Y es que, según ha desvelado la prensa local, el joven estaría relacionado con un hombre de 49 años originario de Lørenskog y vinculado al narcotráfico. Un individuo cuya identidad no ha sido revelada, pero que ha sido condenado por adquisición y venta de drogas como cocaína, anfetaminas o hachís.
Una situación que se complica todavía más tras descubrirse que podría estar ligado también con figuras públicas asociadas al terrorismo. Y es que Marius Borg habría participado en un chat de Whatsapp con dos de los responsables del atentado perpetrado en Oslo durante un festival LGTBI en junio de 2022 u donde fallecieron dos personas, además de que varias decenas resultaron heridas. De hecho, uno de ellos, Zaniar Matapour, fue condenado a 30 años de prisión. Lo que ha desatado una gran investigación, mientras la policía intenta descubrir cuáles son las responsabilidades de cada uno.
Un historial de Borg que no se limita a la situación actual, sino que desde hace meses que los medios noruegos hablan sobre los vínculos tan peligrosos que el hijo de Mette-Marit tenía con diversos individuos condenados por delitos graves, con los que ha llegado a compartir fiestas y encuentros. Relaciones que habrían generado una gran preocupación, sobre todo por cómo puede afectar a la familia real.
Hakoon y Mette-Marit de Noruega, salpicados por el escándalo
Mientras tanto, parece que desde Casa Real procuran guardar silencio. Y es que según argumentaba el príncipe Hakoon, se trata de una situación «difícil y desafiante», por lo que confía totalmente en la justicia. «Ahora se ha aclarado cuál es la acusación y esto debe seguir en los tribunales, que decidirán cómo termina», alegaba al respecto. Del mismo modo, daba a entender que estaban «solucionando las tareas que tenemos de la mejor forma posible». Una breve comparecencia ante los medios, en la que eludió las preguntas de los reporteros y donde concluía afirmando que: «hay otros que están en mejor posición para hablar de ello».
De lo que no cabe duda, es de que tanto el príncipe heredero, como su esposa, Mette-Marit, se han visto salpicados por el escándalo. Y es que desde el diario Bunte aseguran que «la familia real noruega conoce las investigaciones en torno a las denuncias contra Marius Borg desde hace tiempo, pero ¿con qué antelación?»
De esa forma, dejan entrever que desde la familia real han querido proteger en cierta forma a Marius Borg, quien pese a su intento de redimirse e incluso tras pasar por una clínica de desintoxicación, no parece que vaya a cambiar su forma de ser ni su conducta. De momento, habrá que esperar hasta el año que viene para ver cuál es la resolución final y la condena a la que tendrá que enfrentarse.