La Reina Letizia: derroche de sofisticación y un llamativo bronceado en su cita con la literatura infantil y juvenil

Vuelta a la agenda para la Reina Letizia. Apenas unos días después de la marcha de la Princesa Leonor y un día después de que Zarzuela haya emitido un comunicado en el que revela el patrimonio del monarca, la esposa de Felipe VI ha retomado sus compromisos en solitario. Lo ha hecho en uno de los actos ineludibles de su agenda oficial y que, además, está relacionado con una de sus actividades preferidas: la lectura.

La Reina ha acudido un año más en Madrid a la entrega de los Premios SM de Literatura Infantil y Juvenil “El Barco de Vapor” y “Gran Angular”, que han celebrado su 44ª edición y que han recaído en Cristina Fernández Valls y Ginés Sánchez Muñoz.

Ambos autores han sido galardonados por las novelas Jack-Mullet-de-los-Siete-Mares y El mar detrás, dos libros que la editorial SM considera muy sociales, de lucha y búsqueda de la identidad, y que lanzan un mensaje sobre la importancia del cuidado personal, de los amigos, la familia y de cuanto nos rodea.

Estos premios los convoca la Fundación SM, con el objetivo de promover la creación de una literatura para niños que fomente el gusto por la lectura y transmita, con calidad literaria, unos valores humanos, sociales, culturales o religiosos que ayuden a construir un mundo digno. Doña Letizia ha acudido a lo largo de los años a la entrega de estos galardones y, de hecho, en alguna ocasión incluso ha revelado detalles sobre la afición a la literatura de sus hijas, la Princesa Leonor y la Infanta Sofía.

El acto ha comenzado poco después de las 19:30 horas y la presentadora Ana Morgade ha ejercido como maestra de ceremonias de un acto que se ha celebrado en un recinto que en el pasado albergaba una imprenta -un bonito gesto hacia el universo de la literatura-. En esta ocasión, doña Letizia ha apostado por un conjunto de pantalón de corte flare y blusa de manga corta en color verde agua de María Barragán, que resaltaba su espectacular bronceado. Lo ha combinado con zapatos de Magrit en color plata y clutch a tono. Como joyas, no ha faltado su sortija dorada de Karen Hallam y unos pendientes de oro con forma de aro. A su llegada, doña Letizia ha lucido un abrigo blanco de Felipe Varela.

Es la tercera vez que doña Letizia participa en un acto sin mascarilla, dado el cambio de normativa, lo que ha permitido ver su cuidado maquillaje en tonos ocres. En cuanto al cabello, ha apostado por llevar la melena suelta y muy lisa.

Este ha sido el primer acto de la Reina en solitario desde la marcha de la Princesa Leonor a Gales el pasado fin de semana, tras estar durante diez días de vacaciones en España. La hija mayor de los Reyes se enfrenta ahora al último trimestre en el Atlantic College, donde estudia Bachillerato Internacional. En este tiempo, la heredera ha participado en dos compromisos, uno de tintes solidarios con el resto de la familia real y otro en solitario, sobre ciberseguridad, en un centro escolar de la localidad madrileña de Leganés.

Doña Letizia retomará su agenda conjunta con el Rey mañana, con un viaje a Palma de Mallorca, en una nueva etapa del Tour del Talento de la Fundación Princesa de Girona y pondrá el punto final a sus compromisos el jueves, víspera del cumpleaños de la Infanta Sofía, con un almuerzo oficial en el Palacio de la Zarzuela.