Curiosidades de Kitín Muñoz lejos de la realeza: de su verdadero nombre a su pasado como boina verde
Kitín Muñoz es marido de la princesa Kalina de Bulgaria
El verdadero nombre de Kitín Muños es Antonio José Muñoz y Valcárcel
¿La vida de Kitín Muñoz está repleta de curiosidades y ahora que ha acaba de cumplir 65 años es un buen momento para recordarlas. ¿Cuál es su verdadero nombre? ¿Cómo fue su pasado como boina verde? ¿Cuándo se enamoró de la princesa Kalina de Bulgaria? Tenemos respuesta a todas estas preguntas. La mili le permitió cruzar el océano Pacífico y convertirse en todo un aventurero. Su boina, del mismo color, le permitió llegar a lo más alto y convertirse en el explorador más mediático de España.
Su verdadero nombre es Antonio José Muñoz y Valcárcel y nació en 1958, pero todo el mundo le conoce como Kitín Muñoz. Es embajador de la UNESCO y está comprometido con los derechos de los aborígenes de todo el planeta. Todo empezó en Alicante, donde realizó el servicio militar obligatorio. En aquel momento no sabía que su vida estaba a punto de cambiar. Una vida que apasionó a la princesa Kalina, con quien se casó en 2002.
Kitín Muñoz con la princesa Kalina de Bulgaria / GTRES
Su vínculo con la realeza resulta interesante, pero lo cierto es que nunca necesitó ninguna excusa para llamar la atención del público. Nació en Sidi Ifni, una antigua colonia española que hoy pertenece al territorio de Marruecos. Su padre era capitán del Ejército y vivió más de dos décadas en pleno desierto, pro eso su futuro estaba marcado.
Kitín Muñoz estuvo estudiando en París
Kitín Muñoz, además de por su matrimonio con Kalina, es conocido por su espíritu aventurero. En una entrevista que concedió en LOC dio explicaciones sobre todo esto. “Desde niño me atraían las aventuras. Era lo que me gustaba. Crecí en la España de Félix Rodríguez de la Fuente y Miguel de la Cuadra”. Pasó su infancia en el África Occidental debido al trabajo de su padre, pero en cuanto tuvo ocasión se mudó a París. Lo primero era cumplir con sus obligaciones militares, aunque no quería renunciar a su sueño.
Kitín Muñoz pasenado por Madrid / GTRES
“Luego me fui a París para estudiar idiomas, fotografía y viajar”, explicó en la charla citada anteriormente. Cuando estaba en orden recibió una llamada de su padre y su vida dio un giro de 180 grados. Antes de marcharse le prometió que cumpliría con su responsabilidades en el ejército y no tuvo más remedio que hacer caso a lo que le dijo su progenitor. “Estaba con unos amigos y me dijo que me llamaban a filas».
El suceso que cambió su vida
En aquella época Kitín tenía 20 años y se dio cuenta de algo importante: en el campo de batalla todos eran iguales y estaban sometidos a las mismas normas. “Me tocó Alicante y me encantó. Me di cuenta de que allí éramos todos iguales, que no había distinción por clases sociales. Había ricos, pobres, universitarios y gente que no sabía leer”, desvela.
Kitín Muñoz con la princesa Kalina de Bulgaria en el Sahara / GTRES
“Cuando llegué estaban cantando alrededor de una guitarra. Personas del sur y del norte. Todos estaban como una piña. Ya podías ser el tío más rico del mundo que la única medida era el mérito y el uniforme”.
La confesión de Kitín sobre su mujer, la princesa Kalina
Kitín Muñoz asegura que se enamoró de Kalina por su brillante personalidad. Es más, asegura que hubiera seguido sus pasos y se habría convertido en una buena boina verde. Hay un dato curioso, los padrinos de esta boda fueron dos personas importantes en la vida del aristócrata.
“Mis dos sargentos, Terencio Pérez y Alberto Balaguer, fueron testigos de mi boda. Imagínate lo importante que fue para mí aquella etapa”. En ese momento empezó una nueva vida. Tal y como confiesa, la princesa Kalina siempre ha tenido mucho temperamento y podría haber sido boina verde.