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A la Familia Real de Mónaco le ha surgido un nuevo frente con el que no contaban. En medio del cisma que ha ocasionado la debilitada salud de Charlene tras su regreso de Sudáfrica, la prensa inglesa ha publicado un testimonio que pone contra las cuerdas a la esposa de Alberto II. Son las palabras de una persona que revela que la princesa está teniendo un apoyo muy especial durante estos momentos donde se siente tan vulnerable y que, además, es masculino. ¿De quién se trata?
Los dedos apuntan a la figura de Vladislav Doronin, un viejo conocido de la crónica social por haber mantenido un romance (de 2008 a 2013) con Naomi Campbell.
En la actualidad, se trata de unos de los multimillonarios rusos de más prestigio empresarial; entre otras cosas por ser el fundador de Capital Group, con sede en Moscú, propietario y presidente de Aman Resorts, y presidente y CEO de OKO Group. Su relación con la diosa de Ébano detonó de mala manera y el magnate llegó a demandarla en los tribunales, asegurando que le debía 2,5 millones de euros que le prestó y que la top model nunca devolvió.
«Toda la historia es muy compleja y confusa, pero Charlène y Vlad están en contacto y pasaron tiempo juntos», comenta la mencionada fuente a The Sun. Y apuntan a que Charlene y su presunto nuevo confidente se conocen desde hace mucho tiempo e incluso tanto él como Naomi Campbell fueron invitados a la boda de la sudafricana con el hijo de Grace Kelly, en 2011.
La salud de Charlene de Mónaco está lejos de ser la mejor en estos momentos. Cuando todos pensaban que se encontraba guardando reposo en un sitio confidencial, para garantizar su intimidad, Alberto II sorprendió el pasado fin de semana al desvelar la verdad: «La princesa Charlene ya había tomado su decisión, y solo queríamos que nos lo confirmara. Ella quería esto. Ella ya sabía que lo mejor que podía hacer era ir a descansar y tener un tratamiento médico real. Y no en Mónaco. Por razones de privacidad, tendría que estar en algún lugar fuera de Mónaco (…) puedo decir que estaba sufriendo una fatiga increíble. No podía dormir bien durante varios días, no estaba comiendo bien tampoco. Ha perdido mucho peso, lo que la hace más vulnerable a las enfermedades, como catarro, gripe o, Dios nos libre, COVID», explicó con detalle su esposo.
Lo cierto es que Charlene no ha encontrado su mejor estado desde que llegó a Mónaco procedente de Sudáfrica. En su país de origen contrajo una infección otorrinolaringológica que precisó de su paso por quirófano. El Príncipe aseguró en People que su consorte estuvo correctamente durante las primeras horas, pero que “luego se hizo bastante evidente que no se encontraba bien”. Un estado de salud que según las palabras de Alberto II es fruto de “varios factores que son asuntos privados”. Por el momento, no pudo estar presente en el Día Nacional del Principado, una de las fechas marcadas en rojo en el calendario de los monegascos. Sin embargo, sí que estuvo presente puesto que sus hijos se acordaron de su madre de una llamativa manera.