Subsidio de un millón de euros y permiso a los ancestros, los curiosos rituales pre-boda de la princesa Mako de Japón
La nieta mayor del Emperador Akihito de Japón, Mako, se dará el “sí, quiero” a lo largo del próximo año con su compañero de universidad Kei Komuro. Una boda de la que, si bien todavía no se conoce ni la fecha, estará medida al detalle y se oficiará bajo una estricta y rigurosa tradición de siglos de antigüedad con la que Mako, además de convertirse en mujer casada, dejará ser parte de la Familia Imperial.
Según explica el portal ‘Japan Times’, todo comenzará con el conocido como Nosai no Gi, un rito por el que un mensajero del novio visitará el Palacio Imperial y llevará regalos para hacer oficializar el compromiso. A continuación, será el turno del Kokki no Gi, por el que el mensajero anunciará la todavía desconocida fecha de la boda.
Mako de Japón con sus padres y sus hermanos en una imagen de archivo / Gtres
Será entonces cuando, si la ley no se reforma, empezará el adiós de Mako como miembro de la realeza. Según la ley nipona cuando una mujer de la familia se casa con un plebeyo pierde su condición de Alteza Imperial. A cambio, y para poder mantenerse, recibe un subsidio a determinar en un consejo que incluye al primer ministro. La cantidad será especificada entonces, pero el medio afirma que podría ser similar a la que recibió su tía, Sayako Kuroda, al casarse en 2005 con un funcionario tokiota, cuando recibió alrededor de 150 millones de yenes, unos 1,3 millones de euros.
Mako junto a su abuelo, el emperador Akihito, y otros miembros de la Familia Imperial / Gtres
A medida que la fecha del enlace se vaya acercando, tendrán lugar más ritos, entre ellos el Choken no Gi. Se trata de uno de los puntos más simbólicos pues la princesa Mako expresará su aprecio al emperador y a la emperatriz -sus abuelos- y protagonizará una ceremonia en la que anunciará el compromiso y pedirá permiso a sus ancestros.
El último de los ritos tendrá lugar la misma mañana de la boda, el Judai no Gi, cuando un enviado de Kei Komuro recogerá a la princesa en el palacio para llevarla hasta el lugar del enlace. Será después de darse el “sí, quiero”, cuando Mako perderá sus obligaciones y derechos de Alteza Imperial, pasará a ser una ciudadana japonesa más y cambiará su nombre por el de Mako Komuro.