Tamara Falcó responde sobre las ausencias en la despedida a su tío
La hija de Isabel Preysler ha participado en un showcooking en Barcelona junto a los Hermanos Roca
No está siendo un año fácil para Tamara Falcó, pero la hija de Isabel Presyler no pierde la sonrisa. La futura marquesa de Griñón no solo ha tenido que enfrentarse a la repentina muerte de su padre el pasado mes de marzo a causa del coronavirus, sino también, hace apenas unos días a la de su tío, Fernando Falcó. Pese a que en el plano personal para Tamara está siendo un año muy complicado, en la faceta laboral le va viento en popa, sobre todo en lo que respecta a una de sus grandes pasiones, la gastronomía.
La joven ha ejercido de pinche en un showcooking de la mano de los Hermanos Torres, unas de las figuras más destacadas del panorama gastronómico actual. Ha sido en la cocina del restaurante que tienen en la Ciudad Condal, inspirado en la mesa de la cocina de su casa de la infancia. Allí han preparado algunas de sus especialidades y han compartido confidencias con Tamara, que ha atendido a los medios al finalizar.
La joven ha reconocido que está muy contenta de haber podido coincidir con los Hermanos Torres: “estoy súper contenta, ha sido un lujo conocer a los hermanos Torres. Al principio me me imponían bastante pero son amorosos. Ha sido una experiencia única”, ha asegurado. A pesar de que se hizo con el triunfo en la pasada edición de MasterChef Celebrity y de que colabora con el espacio de TVE “Cocina al punto con Peña y Tamara”, la hija de Isabel Preysler reconoce que está aún aprendiendo. Tamara asegura que no tiene ningún ingrediente secreto del que nunca suela prescindir, sino que prefiere innovar, pero en su cocina nunca faltan “su cuchillo, sus pinzas, papel de cocina y boles varios”.
Para la futura marquesa de Griñón los últimos tiempos han sido toda una revolución: “hace unos años no me imaginaba estar en este punto. Me gusta la cocina y me gusta la televisión y además me encanta trabajar en equipo”, asegura.
Tamara Falcó está viviendo un fantástico momento profesional / El Hormiguero
Sin embargo, a pesar de que a nivel profesional no puede tener queja, en el ámbito personal 2020 ha sido un año muy complicado, debido a la pandemia, la muerte de su padre y la de su tío. Pese a todo, Tamara prefiere ser optimista: “intento adaptarme con facilidad, me gusta mantenerme positiva y dar gracias por lo que sí que se puede hacer”. En lo que respecta a los meses de cuarentena, le han venido bien porque “ha bajado el ritmo”. “Tenía tiempo para la oración, lo cual es muy importante, pero ha habido momentos muy difíciles. Mi padre falleció durante la cuarentena y no pude ir a verle y eso ha sido grave y difícil de sobrellevar. Pero mi sobrino está aprendiendo a andar ajeno a todo dolor y a que se está cayendo el mundo y eso ha sido precioso y una fuente de alegría constante. Hay que hacer el equilibrio positivo de las cosas”, resalta.
Hace unos días fueron muchos los titulares que acapararon tanto Marta Chávarri como Esther Doña ante su ausencia en la despedida al marqués de Cubas, de quien la última esposa de Carlos Falcó sí que se despidió en redes sociales. Entre Esther y Tamara no existe una relación especialmente fluida, aunque la hija de Carlos Falcó nunca ha precisado qué ocurre ni ha atacado a la andaluza que, por cierto, podría seguir utilizando el título de marquesa viuda solo si Tamara lo autoriza. Sin embargo, la hija de Isabel Preysler ha reconocido que no faltó nadie al entierro: “la verdad es que todo el mundo se acercó. Están todas las restricciones por el coronavirus, pero la familia estábamos todos allí”, ha dicho.
Quedan pocos días para que la joven sea oficialmente marquesa de Griñón: “es un legado precioso de mi padre, me siento muy honrada, creo que sale en el BOE el 12 de noviembre”. Aunque para ella estos últimos meses han sido complicados, no le pide mucho al año que empieza en apenas ocho semanas: “ el 2021 me gustaría que fuese más tranquilo en el lado familiar, que no tengamos que sufrir tantas situaciones complicadas y que sigan contando conmigo con tantos proyectos interesantes de trabajo porque en ese aspecto sí que estoy súper agradecida y lo más importante es la salud, que nos preocupa a todos ahora”.
La joven también ha revelado uno de sus vicios inconfesables entre fogones: “me encantan las masas crudas. Lo único que me dejaban hacer en casa cuando era pequeña eran postres y siempre metía el dedo. Sé que es un horror decir esto, pero me encantan”, ha dicho.