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A escasos días de finalizar el mes de febrero, la calle Claudio Coello de la capital se ha vestido de gala para convertirse en el perfecto escenario de la sexta edición del Salón de Arte Moderno. Una cita muy especial para los amantes del arte que reúne nada más y nada menos que más de 500 obras de pintores de la talla de Picasso, Dalí, Matisse, Miró, Chillida, Warhol, Tapies, Plensa, Marco Maseda o Javier Calleja, entre otros.
Variaciones de las Meninas de Picasso. / Salón de Arte Moderno
Del 22 al 26 de febrero han sido las fechas escogidas por la Fundación Carlos de Amberes para dar cabida a este evento, el cual cuenta con la colaboración de la Asociación de comerciantes del Barrio de Salamanca Distrito 41 y del Ayuntamiento de Madrid a través del programa TODO ESTÁ EN MADRID. Para que todo salga según lo previsto, los organizadores han optado por poner a disposición de los visitantes hasta 15 galerías tanto de firmas españolas como internacionales, además de artistas contemporáneos y emergentes. Algo que Jorge Alcolea, director del Salón de Arte Moderno, califica como «un diálogo muy importante e inclusivo que ofrece al público una observación diferente al convivir un Miró o un Millares con artistas que aportan NFTs», razón por la que en esta ocasión se espera la visita «de unas 10.000 personas de todos los perfiles, desde el coleccionista grande al pequeño, pasando por el aficionado que no va a comprar a las ferias o museos importantes interesados en hacerlo», añade.
Café de la Habana de Ceesepe.
Pero, si hay un atractivo del Salón en cuestión que destaca sobre el resto es su tamaño, el cual permite admirar a los grandes muy de cerca, en una esfera prácticamente íntima. Más de 500 obras de maestros de vanguardias y arte moderno como Pablo Picasso, Salvador Dalí o Joan Miró conviven durante casi una semana en el mismo habitáculo bajo la atenta mirada de las personas que se acercan a verlas, apreciando la importancia que conlleva este paso al frente dentro del ámbito del arte. Entre los decorados más destacados está el de El Dalí más grande y el Dalí más pequeño, ya que es la primera vez que puede verse en España con un tamaño de diez metros de altura por dieciocho de ancho que el artista realizó para la escenografía del ballet Bacanal, pero no sería el único. También cobra una gran importancia el Crossover de Picasso y Velázquez, ya que Variaciones de las Meninas es unan sorprendente obra de carácter íntimo y personal del maestro malagueño, pensada para ser reproducida en fotografías y dedicarlas a sus más allegados. En tercer puesto está situada la de los Personajes únicos de la movida madrileña, que son dos de las obras de Ceesepe que se ponen por primera vez a la venta: The Jackson Pollock Boudoir y El café de la Habana. Y por último, la de los jóvenes españoles que triunfan en todo el mundo, ya que el Salón de Arte Moderno permite disfrutar del arte de los grandes maestros a la vez que incluye grandes talentos nacionales.