Las personas con síndrome de Brugada pueden experimentar síntomas como mareos, pérdida de conocimiento, dificultad para respirar (especialmente durante la noche), palpitaciones e incluso jadeos. En los casos más graves, la afección puede causar convulsiones o, si no se trata a tiempo, la muerte. Estos episodios son el resultado de las arritmias cardíacas provocadas por la disfunción en los canales de sodio del corazón.
El testimonio de Carla Barber sobre la enfermedad
Carla Barber, la médico estético e influencer, compartió hace algunos años que, al igual que José María Almoguera, fue diagnosticada con el síndrome de Brugada en una etapa tardía. Este diagnóstico cambió radicalmente su vida, llevándola a hacer ajustes importantes para evitar el riesgo de sufrir una muerte súbita.
«Hace justo un mes que me dieron la noticia de que tenía una enfermedad del corazón. No os había dicho nada todavía porque estaba esperando a tomar una decisión sobre qué hacer. Tengo una enfermedad que se llama síndrome de Brugada, es una canalopatía que da lugar a arritmias y que produce muerte súbita», comenzó diciendo. «Es una enfermedad que no tiene tratamiento, no tiene cura, ni tampoco pastillas que se puedan tomar. Lo único que puedo hacer es poner un desfibrilador que impide que en el caso que te de la muerte súbita, te mueras», añadió.