Ya hay fecha para conocer si Mario Biondo se suicidó o fue asesinado
Santina Biondo, madre del exmarido de Raquel Sánchez Silva, espera que el 2019 le traiga la justicia que tanto ha ansiado para demostrar la verdad sobre la misteriosa muerte de su hijo en 2013
Más de cinco años después de la muerte de Mario Biondo son muchos los interrogantes por despejar. El más importante se ha encargado su familia de mantenerlo vivo y no es otro que demostrar que el cámara no se suicidó (tal y como capituló la justicia española) sino que fue asesinado. Ahora, tras una nueva autopsia, Santina y Pippo Biondo están a punto de conocer la resolución final.
¿Cuándo? En tan solo unas semanas. Así lo confiesa la propia madre de Biondo en una conversación con ‘El Español’: «Creo que finalmente conoceremos los resultados para finales del mes de enero. El día 5 se cumplen 60 días pero durante las fiestas de Navidad detuvieron su trabajo».
La tercera autopsia se les encargó a los médicos forenses Vittorio Fineschi y Aniello Maiese, el toxicólogo Marcello Chiarotti y la antropóloga Chantal Milani. Como experto propuesto por la familia ha estado el forense Mariano Cingolani, el experto en antropometría y antropólogo forense Maurizio Cusimano y la toxicóloga Federica Umani Ronchi.
Ellos son los primeros en saber toda la verdad sobre el misterioso suceso acaecido en Madrid en 2013. Un maldito día, Mario Biondo apareció colgado con una pashmina en el salón del domicilio que compartía junto a su por entonces mujer, Raquel Sánchez Silva. La familia del cámara no quiere ni oír hablar de la presentadora española porque consideran que cuando enterraron el cuerpo desapareció y no quiso saber nada más de su marido fallecido.
Lo que está claro es que no ha sido fácil para Santina ni para Pippo, los padres del fallecido, llegar hasta aquí. Han tenido que contratar a diferentes expertos que han entregado dossieres que han sido la clave para reabrir el caso. Todo eso, más los peritos que se han encargado de la autopsia, ha supuesto un elevado coste económico. Son una familia con un nivel adquisitivo medio, y para este fin han tenido que pedir ayuda. Lo ha hecho a través de Facebook, poniendo una cuenta corriente en la que quien lo considere oportuno puede realizar un ingreso, esperan así, una vez todo haya acabado, poder pagar a quiénes les están prestando sus servicios. Pero lo que más esperan, sin duda, es que la justicia les dé la razón para poder descansar tranquilos.