Ivonne contraataca: "Pepe Navarro quería hacer un reportaje con mi hijo y repartirse el dinero"
Ivonne Reyes ha dado un golpe en la mesa y ha concedido una entrevista esclarecedora en la que pone a raya a Pepe Navarro. La modelo no va a consentir que el presentador tenga la última palabra sobre el famoso tema de la paternidad de su hijo y ha narrado cómo vivió ella la relación. La modelo lo tiene claro: su hijo no se someterá a nuevas pruebas.
Ivonne califica de «absurdo» el hecho de haberle cogido una servilleta a Pepe Navarro para hacer la prueba por su cuenta, tal y como se especuló en ‘Mi casa es la tuya’: «El único que ha tomado muestras de nuestro hijo, que es menor de edad, y sin mi permiso, es él». Durante esas comidas, mantiene la venezolana, Navarro le propuso volver a tener relaciones y ella se negó: «Fíjate si podría haber tenido la oportunidad de ‘quitarle una muestra’ cuando quisiera. Miente».
A los pocos días del segundo encuentro -tras el que, según Pepe Navarro, Ivonne ‘desapareció’- dos periodistas le abrieron los ojos: «Me dicen que Pepe había hecho una prueba en 2015 y que como sabía que era negativa por eso estaba pidiendo pruebas oficiales. Quería que no se filtrara a la prensa y adelantarnos a hacer un reportaje los tres y repartirnos el dinero. A los días salió la noticia que él me había negado y me quité de en medio».
Miedo a represalias y desprestigio
En un principio la modelo venezolana se negó a desvelar la identidad del padre de su hijo por miedo a las posibles represalias de Pepe Navarro, ya que «en ese momento tenía mucho poder en los medios». Cuando por fin se atrevió a reclamar la paternidad al cordobés comenzó una campaña de desprestigio: «Un medio nacional hacía quinielas sobre quién sería el padre. Pretendían hundirme. Hubiese necesitado un bufete de abogados para mí sola». En retrospectiva, entiende que el espectador haya pensado que jugaba a la ambigüedad, «aunque en realidad no sabía cómo salir del embrollo».
Ivonne Reyes en imagen de archivo / Gtres
Ivonne manifiesta que llegó a pedirle la prueba de paternidad hasta en cuatro ocasiones: «En cada una de las negativas del señor Navarro, un auto del juzgado le advertía de lo que podía suceder». Los ‘emails’ que vieron la luz recientemente no se mostraron en su totalidad para la maniquí. «Yo siempre quise una relación padre-hijo y creía que esas eran sus intenciones. En la primera cena que tuvimos me dice que sabe que mi hijo es su hijo, pero que necesita que sea oficial por sus hijos. Yo lo escuché. En la segunda cena ya lo vi en una actitud diferente», ha asegurado.
Pepe Navarro en imagen de archivo / Gtres
No habrá más pruebas
El presentador nunca le comunicó que su hija Andrea presentaría el recurso: «De eso me enteré en la casa de ‘GH VIP’. Después, como se dio cuenta que no cedería, su hija trató de contactar con nuestro hijo para reunirse con la excusa de tomar algo y conocerse. Yo sabía que no había buenas intenciones y lo paralicé».
Se mantiene firme en su determinación de ‘no más pruebas’: «Ya hice lo que tenía que hacer en su momento. No quiero que mi hijo pase por esta situación de nuevo. ¿Ahora le ha nacido el instinto de querer saber? Pues no. Si mi hijo decide otra cosa en el futuro, tendrá mi apoyo». La modelo asegura que en uno de sus encuentros, Pepe entonó el ‘mea culpa’: «Bajó la cabeza y me pidió perdón por todo el daño que me había hecho. Pensé que era verdad, hoy sé que no».
Dado el aluvión de comentarios, la venezolana se sienta todos los días con su hijo para protegerlo de todo el daño posible. Tanto ella como su hijo tienen claro qué papel juega Pepe Navarro en sus vidas y sentencia que no será ella, en todo caso, quien tenga que abandonar España ante el bochorno de la verdad.
«Estuvimos muy enamorados»
La concursante de ‘Gran Hermano’ ha asegurado que se conocieron en el programa ‘El juego de la Oca’ y que iniciaron entonces un romance que siempre culminaba en su casa: «Él era muy atento y cariñoso, lo pasábamos muy bien. En ese momento pensé que estaba enamorado de mí, nos apoyábamos y nos lo contábamos todo. Estábamos muy enamorados».
Para la maniquí la relación comenzó en 1995 y terminó en 1999: «Fue en ese verano cuando volvimos y me quedé embarazada». Su amor se fracturó para siempre el 31 de diciembre, en pleno brindis. «Siempre me daba largas, no se decidía a dar el paso de que viviéramos juntos. Ese día le dije: este será el último. Y así fue», ha asegurado Ivonne en la revista ‘Diez Minutos’.
Durante el tiempo que duró su ‘noviazgo’ tuvieron una pequeña crisis que empujó a la modelo a conocer a otros hombres: «Tuve varias relaciones, algunas más intensas que otras. Como mujer soltera, ¿dónde está el problema?» Guarda un buen recuerdo del actor venezolano Aroldo Betancourt, quien para Ivonne fue un caballero: «Cuando supo que Pepe no quería darle los apellidos al niño, se ofreció a darle los suyos por el cariño que nos teníamos».
La modelo y su pareja Sergio Ayala en imagen de archivo / Gtres
La novia de Sergio Ayala reconoce que tuvo dos pérdidas de Pepe Navarro: «Nunca pusimos precauciones. Así que sabíamos que podía pasar. Las dos veces que me quedé embarazada él me decía que no era el momento. Pepe nunca dudó ser el padre, de hecho me acompañaba a las clínicas». Ante las palabras del presentador en ‘Mi casa es la tuya’ en las que aseguraba que en la época del embarazo mantenían solo una relación paterno-filial y que quiso ayudar a la modelo económicamente ofreciéndole un programa, Ivonne responde: «Una más de sus fantasías. Se rió de mí y se desentendió de todo. Me dijo que haría todo para que me fuera de este país».