Anna, la hija de Paz Padilla, explota contra la empresa que ha reformado su casa: "Una chapuza"
Anna Ferrer, la hija de Paz Padilla, ha denunciado en redes a la empresa que le hizo la reforma de su casa
La creadora de contenidos ha dicho que le parece "una chapuza" el trabajo de la mencionada empresa

Anna Ferrer, la única hija de Paz Padilla, ha estallado en redes sociales. La joven, que se dedica a redes sociales como creadora de contenidos -y donde acumula más de ochocientos mil seguidores-, ha denunciado públicamente «la chapuza» que le hizo la empresa de reformas de su nueva casa en propiedad. Aunque la influencer ya adelantó en su cuenta personal algunos ejemplos, ahora ha mostrado otros rincones de su hogar en común con Mario Cristóbal, su novio, que ha tenido que volver a retocar.
Anna Ferrer denuncia públicamente en redes a la empresa de reformas
Si por algo se caracteriza Anna Ferrer es por su naturalidad a la hora de hablar sobre su vida privada. Aunque en un principio fue más reticente y hermética con su intimidad, lo cierto es que con el tiempo encontró en sus redes sociales un espacio seguro para hablar de muchos temas de interés para sus seguidores. Al igual que su madre, Anna es un libro abierto y desinteresadamente cuenta cómo es su día a día como creadora de contenidos. De hecho, hace casi un año anunció que, a su temprana edad, se había comprado su primer inmueble y que ya estaba inmersa en la reforma.
Sin embargo, para Anna el resultado no ha sido lo esperado. La hija de la presentadora de Zahara de los Atunes, confió en una empresa para la reforma de su primera casa en propiedad. Ahora, a través de sus historias temporales de Instagram, ha mostrado algunos rincones de su casa que considera «una chapuza».
Anna Ferrer Padilla enseña la parte exterior de una de las ventanas tras la reforma. (FOTO: REDES SOCIALES)
«Voy a contaros toda la chapuza que me hicieron en la reforma sin enfadarme», ha comenzado diciendo. Antes de mudarse a su casa definitiva, desde hace años que Ferrer se independizó de su domicilio familiar y comenzó a vivir de alquiler en el centro de Madrid. Es por ello que, tras comprar su hogar, comunicó a los propietarios de su anterior piso la fecha de su mudanza, al igual que a la empresa de reformas para que, cuando ella llegara con sus enseres, estuviera todo a punto: «Primero, que tardaron mucho más de lo esperado y el día que vine a hacer la mudanza, que ellos lo sabían con tres meses de antelación que, además, tuve que avisar a mi piso de alquiler que lo dejaba. Llegué aquí y aún estaban poniendo los rodapiés, me faltaba un baño entero, no tenía lavabo… Estaba todo a medio hacer».
Además, ha enseñado cada uno de los rincones de su casa que considera que no están terminados o mal hechos: «Cuando digo chapuza me refiero a los acabados en general. Por ejemplo, una puerta corredera no cerraba y la puerta de mi habitación se abría sola. ¿Esto que es? Se dejaron sin poner la cornisa de la ventana, los embellecedores. Una pared del salón no está recta. Mirad el váter, se ve el pladur. El enchufe de mi mesilla no iba. Los interruptores, ninguno enciende el correcto».


Anna ha querido enseñar también parte de «la chapuza» del interior de su casa. (FOTO: REDES SOCIALES)
Finalmente, la influencer ha decidido ponerse de nuevo manos a la obra y arreglar «la chapuza» a la que se refiere tras contactar en varias ocasiones con la empresa que le hizo la reforma: «Llevo como dos meses detrás de ellos hasta que decidieron que estaba todo ya terminado y se acabó». «