Un amor infinito y tres hijas: la familia ideal que deja Kobe Bryant tras el trágico accidente
El amor de su vida, Vanessa Bryant, y sus tres hijas Natalia, Capri y Bianka han perdido al que, además de ser una leyenda del baloncesto, era su héroe.
Todo el mundo sigue en shock. El legendario escolta de Los Ángeles Lakers, Kobe Bryant, falleció este domingo en un trágico accidente de helicóptero junto a una de sus hijas, Giana, de 13 años. Más allá de su trayectoria profesional, de sus cinco anillos ganados en la NBA, su MVP de la temporada en 2008 y sus casi 33.000 puntos anotados en partidos, Kobe era un padre de familia y un marido ejemplar. Así le define todo su entorno.
Su gran pasión fue el baloncesto, pero su prioridad era el clan Bryant, formado por sus cuatro hijas, Natalia, Giana, Bianka y Capri, y el amor de su vida, su esposa Vanessa. Esta angeleña de origen latino robó el corazón al de Philadelphia con tan sólo 17 años. Ambos se conocieron rodando un videoclip y sufrieron un ‘flechazo’. Tan sólo un año después, cuando Vanessa cumplió los 18 años, un Kobe Bryant de 20 años se decidió a pedirle matrimonio. Y sellaron su amor convirtiéndose en matrimonio.
En 2001 se casaron sin contar con la presencia de la familia de Kobe. Ni sus padres, Joe y Pam, ni sus hermanas Sharia y Shaya asistían a la ceremonia porque no aprobaban la relación con Vanessa. Pese a los obstáculos, su historia de amor continuó, aunque sufrió muchos altibajos en estos más de 20 años de relación.
La primera prueba de fuego llegó en el año 2003. Una joven de 19 años, que trabajaba en un hotel de Colorado, acusó y demandó a Kobe por abuso sexual. El caso fue desestimado y retiraron los cargos contra el deportista, que reconoció haber mantenido relaciones con la presunta víctima pero de forma consensuada.
El segundo golpe llegó dos años más tarde: el matrimonio perdió el bebé que esperaban en la primavera de 2005 como consecuencia de un embarazo ectópico.
Las diferencias parecían irreconciliables y, tras una fuerte crisis, Vanessa inició los trámites de divorcio en 2011. Sin embargo, jamás llegó a producirse. En 2013, la mujer de Bryant informaba a través de sus redes sociales que su marido y ella estaban felices de anunciar que se habían reconciliado. «Nuestro divorcio está desestimado. Estamos mirando hacia adelante para tener un futuro juntos».
Un futuro que se ha visto truncado por la trágica muerte del jugador, que perdía la vida este domingo a los 41 años. Black Mamba, como se le conocía popularmente, deja atrás a tres niñas. Natalia (17), Bianka (4) y Capri, de siete meses, dicen adiós al que siempre será su héroe.