Max Verstappen es un fiel aficionado del Barcelona. Así lo confesó hace unos años tras debutar en la Fórmula 1 y su firmeza ante los constantes batacazos de su equipo en los últimos tiempos le confirman como un verdadero culé. Es por eso que el piloto de Red Bull dijo que «siempre» será «fan» del Barça «pase lo que pase», pero Verstappen no duda de que la siguiente temporada «va a ser difícil» especialmente «si ves como se está reforzando el Real Madrid».
Los eternos rivales de España están muy separados en cuanto a nivel a día de hoy. Tras un año en blanco, en el que el Real Madrid además levantó tres títulos, al Barcelona no le queda otra que reaccionar. «Será nuevamente una temporada difícil, porque debe tratar de batir al Madrid. Pero siempre tienes que creer. El Barça también tiene un buen equipo y ahora con el nuevo entrenador nunca se sabe lo que puede pasar», dijo Verstappen, que confía en el resurgir de su equipo con Hansi Flick.
El técnico alemán contará en sus filas con la nueva estrella blaugrana, Lamine Yamal. Después de su buena temporada, el extremo de 17 años ha estallado por completo en la Eurocopa, siendo clave en el cuarto título de la selección española. Verstappen también debutó a esa edad, ganando su primera carrera precisamente en la Ciudad Condal, en el circuito de Montmeló.
«Lo de Lamine es increíble. Quiero decir, a esa edad, jugar para la selección de tu país y rendir como lo hizo en la Eurocopa es algo que disfruté mucho de ver», afirmó Verstappen en una entrevista con Mundo Deportivo. El holandés es otro más que quedó totalmente alucinado con el fútbol de Yamal, pero no lo compara con él mismo: «No me gusta hacer este tipo de comparaciones, pero jugar a esa edad tan bien y con tanta confianza en sí mismo también es algo muy especial».
Verstappen ve muy complicado batir al Real Madrid
El Barcelona y Holanda siempre han estado ligados históricamente. Una de las mayores leyendas del club, Johan Cruyff, le dio un mensaje a Verstappen en 2016 que se le quedó marcado y que aún no ha podido olvidar: «Cruyff fue una inspiración para mí. Lo conocí en 2016. Y nunca olvidaré lo que me dijo: ‘Voy perdiendo 2-1 al descanso –refiriéndose a su enfermedad–, pero voy a ganar el partido’. Siempre estaba muy motivado y siempre creyó en que podía superarlo», explicó.
Ahora, un Verstappen más maduro de 26 años y con tres Mundiales en su haber va camino del cuarto en el año más complicado para su escudería. A Red Bull le salió en primer lugar la alternativa de Ferrari y cuando esta se vino abajo McLaren y Mercedes han apretado como jabatos para complicarles cada carrera. El holandés no gana una carrera desde España y llega a Budapest para volver a la senda de la victoria y seguir separándose de sus perseguidores en la tabla.
«Solo trato de ser consistente. Trato de no sobrecompensar. Trato de simplemente pilotar al máximo de mis habilidades. Y eso también, por supuesto, es lo mismo para el equipo: intentar tomar las decisiones correctas, y tuvimos algunas carreras donde era importante tomar las decisiones correctas, y lo hicimos como equipo. Y así es como también puedes ganar carreras», analizó sobre su actuación hasta el momento.
