César Soto Grado, árbitro del partido Mallorca-Real Madrid de la primera jornada de Liga, perdonó una expulsión a Pablo Maffeo, jugador del cuadro balear, por una durísima entrada a Vinicius en el tiempo de descuento de la primera parte. El colegiado abulense, adscrito al Comité riojano, no quiso enseñarle la cartulina roja a Maffeo pese a que sí vio la acción, motivo por el que enseñó la cartulina amarilla.
Soto Grado, recordado por ser el árbitro que dijo a los jugadores del Real Madrid en un partido «habéis tenido 90 minutos para marcar», no quiso enseñarle la roja a Pablo Maffeo por esa durísima entrada a Vinicius. El jugador del Mallorca puso los tacos en la parte baja del gemelo del futbolista brasileño en una fea entrada que no tuvo el castigo de la expulsión.
El colegiado de este encuentro vio claramente la acción, ya que enseñó la amarilla a Maffeo, pero no sacó la roja. La jugada ocurrió en el minuto 48 de la primera parte, ya en el tiempo de descuento. Iglesias Villanueva, responsable del VAR de este partido de Liga, no llamó tampoco a Soto Grado para que revisara la acción en el videoarbitraje.
César Soto Grado tiene un largo historial con el Real Madrid. En total le ha pitado 19 veces al Real Madrid (contando el encuentro de este domingo en Palma), con 12 victorias para los blancos, cuatro empates y dos encuentros perdidos. Además, el equipo de la capital de España es al que en más ocasiones ha dirigido sobre un terreno de juego en Primera.
Su momento más recordado contra el Real Madrid ocurrió el 27 de octubre de 2021, día en el que Soto Grado pitó en el Santiago Bernabéu un Real Madrid 0-0 Osasuna, que acabó con las protestas de los jugadores del conjunto blanco por el poco tiempo añadido, a lo que el árbitro abulense respondió: «habéis tenido 90 minutos para marcar».
Ahora, en este Mallorca-Real Madrid de la primera jornada de Liga, Soto Grado no expulsó a Maffeo por esa fea acción de Vinicius. El defensor del Mallorca tiene un largo historial contra el del Real Madrid, al que persigue continuamente con faltas y provocaciones. En este encuentro en Son Moix se volvió a repetir ese guion.
