El Real Madrid estuvo cerca de perder dos puntos contra el Getafe en la última jornada del partido de la jornada 33 de Liga. Después de resistir a los múltiples intentos de los azulones por empatar, los de Carlo Ancelotti respiraron con una acción ofensiva en la que Rodrygo Goes se metió en el área y fue claramente derribado por un rodillazo por detrás de Ismael Bekhoucha. El árbitro de campo, Sánchez Martínez, no vio penalti y eso ocasionó un contraataque de muchísimo peligro a favor de los de José Bordalás en el Coliseum.
Era la última jugada del partido y por suerte para los blancos, Thibaut Courtois, que hizo una estelar segunda parte, apareció con una mano salvadora al tiro del canterano madridista Álvaro Rodríguez. Sus tres paradas en los últimos cinco minutos, sumadas al gol de Arda Güler, le dieron al Real Madrid una victoria que le permite seguir en la pelea por el título al mantenerse a cuatro puntos del Barcelona.
Sánchez Martínez fue el culpable de que esa última acción sucediera y, aunque en el caso de marcar el Getafe pudiera haber sido rebobinada por el VAR para señalar la pena máxima, queda señalado en un encuentro sin demasiado revuelo arbitral. Rodrygo, a su vez, se quedó sin la oportunidad de dar a sus compañeros una opción clara para el 0-2, por lo que el triunfo del Real Madrid fue por la mínima. Ahora llega el Clásico de la final de la Copa del Rey ante el Barça.