El Real Madrid ganó 1-2 al Sporting de Braga en la tercera jornada de la fase de grupos de la Champions. Un resultado que deja a los hombres de Carlo Ancelotti virtualmente en octavos de final de la máxima competición continental y que confirma la resurrección de Rodrygo, que no veía puerta desde el 12 de agosto.
A los 16 minutos, un pase de profundidad de Nacho a Vinicius, que no controla de primeras y se le escapó en el bote, pero era mucho más rápido que su marcador, al que rompió, pisó línea de fondo y puso un balón atrás que Rodrygo remató para acabar con una sequía goleadora que estaba durando demasiado tiempo. El brasileño metió el pie sin temor y con la confianza que le estaba siendo esquiva para perforar las redes lusas.
Un gol que permitió a Rodrygo quitarse de un plumazo toda la ansiedad que le estaba atenazando y convertirse en el brasileño que más goles en la historia del conjunto blanco en la Champions, superando a Ronaldo, que se quedó en 15 tantos, e igualando con 16 dianas a Roberto Carlos y a Vinicius.
Desde aquel gol ante el Athletic a los 28 minutos de partido, Rodrygo ha estado sobre el césped un total de 936′, contando descuentos, en los que ha sido incapaz de ver portería. Es decir, si este tiempo se divide entre 90, sale que el brasileño ha estado más de 10 partidos sin ver portería. Unos registros que le agobiaban y le llenaban de ansiedad, pero que en Braga despejó de un plumazo.
Este gol, además, llega en el momento perfecto para Rodrygo y para un Ancelotti que siempre ha confiado en el brasileño, a pesar de que no ha estado todo lo acertado que se le exige. Pensando en lo que le viene por delante a los blancos, empezando por el Clásico contra el Barcelona del próximo sábado, que el delantero recupere su olfato goleador y, sobre todo, que se quite de cima una losa que le estaba afectando en su juego es muy importante.
El Madrid tiene un problema
El Real Madrid demostró su fragilidad en los balones aéreos en el duelo que enfrentó a los blancos con el Sporting de Braga. Cada pelota por alto fue un quebradero de cabeza para los madridistas, ya que no fueron capaces de hacerse fuertes en esa faceta y Kepa, como es habitual en el meta vasco, optó por no salir demasiado. La intensidad defensiva en las segundas jugadas evitó males mayores para los de Ancelotti.
Vinicius recupera la chispa
Vinicius cada vez está más entonado. Poco a poco, va volviendo a ser el de antes de la lesión. Contra el Sporting de Braga demostró su velocidad, volvió a ser un incordio para los zagueros lusos, los encaró una y otra vez y dio una asistencia a Rodrygo que permitió a los madridistas abrir el marcador. También marcó, pero fue anulado por un fuera de juego muy justo.
Camavinga para todo
Camavinga retrasó su posición en Braga. Abandonó el interior para jugar de pivote y su rendimiento fue más que notable. El francés estuvo perfecto en la recuperación, en la presión y siempre fue una ayuda para sus compañeros en el ataque. Con la entrada de Tchouaméni volvió a su puesto y metió varios balones peligrosos a Vinicius.
Bellingham siempre está y crea alarma
El inglés, que no marcó en Sevilla, se reencontró con el gol contra el Braga. Dio un pase a la red en la segunda mitad para hacer el segundo gol del partido y anotar su undécimo gol en lo que va de temporada. Bellingham sigue marcando diferencias.
En los minutos finales del partido, el inglés tuvo que abandonar el partido por molestias. Teniendo en cuenta que el Clásico está a la vuelta de la esquina, la alarma en el conjunto blanco es lógica.
Las notas del Real Madrid
- Kepa: 6
- Carvajal: 6
- Rüdiger: 6
- Nacho: 6
- Fran García: 5
- Camavinga: 7
- Modric: 7
- Valverde: 6
- Bellingham: 7
- Rodrygo: 7
- Vinicius: 7
- Tchouaméni: 6
- Mendy: 5
- Lucs Vázquez: 5
- Ancelotti: 6
