El Real Madrid sigue esperando el permiso de la FIFA para poder contar con Iker Bravo. El delantero lo tiene hecho con el conjunto blanco, ha pasado reconocimiento médico y todo está preparado para que comience a trabajar a las órdenes de Raúl, pero al ser menor de edad -tiene 17 años- debe esperar una autorización del máximo organismo continental que apruebe su fichaje. Desde Valdebebas esperan que este OK definitivo llegue pronto, aunque en estos momentos parece complicado que pueda estar disponible para jugar el próximo sábado ante el Linense en el debut del primer filial madridista en Primera Federación.
Aunque el acuerdo es total, legalmente Iker Bravo sigue siendo jugador del Bayer Leverkusen. Por este motivo, cuando Santi Denia ha dado a conocer la lista de convocados para los encuentros que la selección española sub-19 la próxima semana ante Israel en Las Rozas el atacante sigue apareciendo como jugador del conjunto alemán y no del Real Madrid. El deseo es que en los próximos días esta condición cambie.
Hay que recordar que Iker Bravo, canterano del Barcelona, también era pretendido por el Atlético de Madrid, que estuvo muy cerca de ficharle. Sin embargo, el interés del Real Madrid en reclutarle cambió todo hasta el punto de que el jugador presionó para que el Leverkusen aceptase la oferta madridista.
La entidad alemana, que tenía al jugador inscrito en su página web en la primera plantilla, prefería retenerle, pero el deseo del delantero fue determinante para tener que acabar cediendo. Bravo llega al Real Madrid cedido una temporada con opción de compra. El precio de la cesión es de unos 150.000 euros a los que habría que añadir otros 100.000 en caso de que disputase 20 partidos. De esta forma, el Real Madrid gana la batalla, ya que las cifras estás muy lejos del millón de euros que comenzó pidiendo el Bayer. La opción de compra será de unos 6 millones.
Iker Bravo salió del Barcelona en busca de minutos en la élite y una oportunidad que el conjunto azulgrana no podía proporcionarle a su temprana edad. Durante este primer año en Alemania, el joven delantero ya se ha dejado ver con el primer equipo en un partido de la Bundesliga y otro de Copa.
Siendo una de las grandes promesas del fútbol español y fijo en las categorías inferiores de la selección, Bravo veía con buenos ojos regresar a España para adquirir un rol más importante en un proyecto más ambicioso. El Real Madrid realiza esta operación no pensando en la primera plantilla, sino como un refuerzo de lujo para el Castilla de Raúl.
