Pablo Laso recibió una ovación interminable por parte de la afición madridista en su regreso al Wizink Center. El madridismo recibió al técnico vitoriano como una auténtica leyenda y el actual entrenador del Bayern de Múnich terminó con lágrimas en los ojos justo antes de iniciar el partido de Euroliga.
Los jugadores del Real Madrid también se unieron a la gran ovación del Wizink Center que puso en pie a todo el madridismo para recibir a una leyenda en mayúsculas como es Pablo Laso. Otras leyendas, sobre la pista, como Llull y Doncic se rindieron a su ex entrenador a través de redes sociales. Sobre la cancha fue el madridismo quien rindió homenaje al mejor entrenador de su historia.
En pie, lágrimas en los ojos.
Ha vuelto una 𝐋𝐄𝐘𝐄𝐍𝐃𝐀: Don Pablo Laso. #Eurofighters pic.twitter.com/Gz0o57lVUR— Movistar Plus+ (@MovistarPlus) December 14, 2023
22 títulos, entre ellos dos Copas de Europa, siete presencias en ‘Finales a Cuatro’, y un recórd de partidos (860) y victorias (659) aderezan el curriculum de Pablo Laso en su paso de once años por el conjunto madridista, que prescindió de él tras sufrir un infarto en junio de 2022. Fue recibido en el Wizink Center con mucho cariño por parte de una grada donde era y sigue siendo un auténtico ídolo.
Sin duda, Laso dejó huella en el once veces campeón de Europa, sobre todo en un estilo alegre y ofensivo que cuajó y que provocó que la gente se enganchase de nuevo a un equipo que estaba de capa caída cuando llegó
y con el que se reencontró por primera vez de forma oficial, después de haberlo hecho este pasado verano en un amistoso en Málaga, con derrota clara por 85-65.
El ex técnico madridista también se cruzó con Chus Mateo, el que fuera su ayudante en el banquillo merengue durante ocho años y que le relevó en el puesto de entrenador del Real Madrid. El preparador madrileño, que el año pasado tuvo que lidiar con las comparaciones con su predecesor hasta que logró la Euroliga, tiene actualmente al actual campeón en un gran estado de forma, apuntalado por su tres victorias en sus cuatro salidas consecutivas que tuvo que afrontar, las dos últimas en canchas complicadas como las de Olympiacos y Panathinaikos.
Junto a Laso, también vivió un regreso especial al recinto capitalino un Serge Ibaka que volvió a Europa este verano tras su largo paso por la NBA y que tuvo un paso por el Real Madrid, breve, en la campaña 2011-2012 por la huelga en la liga estadounidense, y Dino Radoncic, que estuvo en la cantera madridista y que jugó con el primer equipo de la mano del técnico vasco.