Marcelo no se rinde. El lateral brasileño ha desaparecido de los planes de Zinedine Zidane en los últimos partidos y Mendy se ha adueñado claramente del flanco defensivo izquierdo coincidiendo con la racha de seis victorias consecutivas que ha cosechado el Real Madrid. Sin embargo, lejos de venirse abajo, el segundo capitán sigue trabajando para ganarse una nueva oportunidad del técnico.
Es por ello que a pesar de que los jugadores madridistas gozan de unos días de descanso y no vuelven a los entrenamientos hasta el próximo domingo por la tarde, Marcelo ha decidido no parar y ha compartido con sus seguidores en Instagram una serie de vídeos en sus stories en los que se le ve machacándose en el gimnasio. En las imágenes, el brasileño realiza sentadillas, splits o flexiones a una pierna trabajando con diferentes pesos.
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Marcelo se ha ido junto a su mujer y sus dos hijos a Sierra Nevada a pasar la Navidad. Ha sido precisamente, o al menos eso ha indicado el brasileño, en el gimnasio del hotel donde ha decidido interrumpir su descanso para entrenar y no perder la forma pensando en intentar ganarse una oportunidad para el próximo partido del Real Madrid, que le enfrenta al Elche en el Martínez Valero.
El segundo capitán madridista se ha puesto en manos de Adolfo Madrid, uno de los preparadores físicos más reconocidos y que trabaja con otros futbolistas como Marcos Llorente. Después de ser uno de los jugadores más señalados, concretamente por su estado de forma, Marcelo recurrió a un entrenador personal que le ayude a encontrar el punto físico necesario para poder ofrecer un rendimiento adecuado a lo que se espera de un jugador que ha dado tanto al Real Madrid en los últimos años y que parece haber desaparecido. Ni rastro del jugador que desbordaba y que se convertía en un puñal en ataque con sus goles y asistencias.
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Pese a que desde el club no se opondrían a facilitarle una salida, Marcelo no tiene la más mínima intención de salir. Señal de ello es su compromiso ejercitándose en sus días libres.
Además, cabe recordar que los números no le ayudan. En todas las derrotas ligueras cosechadas desde que Zidane regresó al banquillo del Real Madrid hay un denominador común y es la presencia del brasileño en el once titular, un dato que indica a las claras que algo no funciona. Pese a ello, Marcelo no se da por vencido: quiere ganarse una nueva oportunidad.
