«Lo de Hernández Hernández es una vergüenza»
El Real Madrid tiene un enfado monumental con el árbitro Alejandro Hernández Hernández por su actuación en el derbi madrileño. La plantilla madridista cataloga el papel del colegiado como "una vergüenza"
Indignación mayúscula en el Real Madrid con la actuación de Alejandro Hernández Hernández en el derbi contra el Atlético. No es para menos. El colegiado perdonó un penalti a los rojiblancos, pese a verlo en el VAR. El canario consideró que no debía señalar la mano de Felipe, que desvió la trayectoria del balón e impidió a Casemiro rematar en boca de gol, pese a la llamada desde la sala VOR de González González para que tratase de rectificar su decisión.
El árbitro no quiso modificar su decisión, aunque las imágenes no dejan lugar a dudas y, con el reglamento en la mano, es penalti claro. De nuevo, volvió a tomar una decisión que perjudica al conjunto madridista, al que le tiene tomada la matrícula.
El Real Madrid temía, antes del partido, que Hernández Hernández volviera a hacer de las suyas en el derbi. Tenían motivos más que de sobra para desconfiar, después del amplio historial del canario en muchos de los encuentros pitados al conjunto madridista. Como es habitual en él, volvió a fallar perjudicando a los de Zidane, lo que ha encendido a todos los estamentos del club, desde la propia directiva hasta la plantilla.
Emilio Butragueño se quejó a la conclusión del encuentro de los constantes atropellos del colegiado al conjunto madridista. El director de Relaciones Institucionales, siempre moderado en su discurso, apuntó que no tuvieron «suerte con Hernández Hernández, de nuevo», al ser preguntado acerca del penalti que se negó a señalar y que podía haber cambiado el rumbo del encuentro y del propio campeonato.
No es propio del ex jugador del Real Madrid pronunciarse acerca de las actuaciones arbitrales, pero coincide con el de una plantilla que está más que descontenta con la polémica decisión sobre la mano de Felipe. Zidane y Benzema, que tampoco se caracterizan por sus rajadas y, una vez más, se contuvieron al hablar con los medios. No lo hacen desde dentro del vestuario, donde claman que «lo de Hernández Hernández es una vergüenza».
Un historial delatador
No es la primera vez que el Real Madrid se ve afectado por las decisiones del árbitro canario. Cada encuentro de los blancos con Hernández Hernández al mando, saben que deberán remar contracorriente. Lo habitual con él es que las jugadas polémicas siempre caigan del lado del rival y los hechos son más que claros. Prueba de ello es que de los 26 partidos que ha dirigido ante los madridistas en sus nueve años en la élite se saldan con un balance de 14 victorias, cinco empates y siete derrotas. Casi ninguna de ellas exentas de polémica.
Los blancos ya salieron perjudicados la pasada temporada en dos de los tres partidos que les pitó, ante el Levante (derrota por 1-0) y en el Clásico en el Camp Nou ante el Barça (empate sin goles). Contra los granotas, se reclamaron dos penaltis por mano de Toño y Campaña que se negó a señalar; mientras que ante los culés el escándalo fue aún mayor, al no querer pitar tres penaltis claros, sobre todo uno en el que Lenglet le dejó los tacos clavados en el muslo a Varane. En esa ocasión, tampoco ayudó la presencia de De Burgos Bengoetxea en el VAR.
Meses antes, en otro Clásico, dio validez a un gol de Messi, tras una clara falta de Suárez a Varane en un encuentro que terminó con empate a dos. Esa misma temporada -la 18-19 y aún sin VAR- Portu marcó un gol en fuera de juego y Aday sacó un gol con el codo en la victoria del Girona por 2-1.
En esta ocasión, era el primer derbi madrileño que pitaba y el resultado de su presencia sobre el césped no ha podido ser peor para los intereses madridistas. El conjunto blanco se deja dos puntos en el Metropolitano por la enésima decisión del árbitro que les perjudica, con el agravante de que, además, da la espalda a los criterios marcados por el propio CTA el pasado 2 de marzo.
«Hay decisiones que están predeterminadas»
La inquina de Hernández Hernández hacia el Real Madrid quedó demostrada el pasado 22 de febrero de 2020, en el Ciutat de Valencia. Entonces, el colegiado se negó a revisar y señalar dos penaltis cometidos por sendas manos levantinistas en el área, en un encuentro que terminó con derrota de los blancos. Entonces, Sergio Ramos no se mordió la lengua en la zona mixta, donde opinó sobre el canario y reveló su enfrentamiento con él durante el encuentro.
«Me voy jodido con el árbitro. Antes los árbitros eran más respetuosos. La arrogancia es algo que se tiene o no se tiene. Le he preguntado si tiene algún problema personal. Hay decisiones que están predeterminadas. Si hay algo personal, que me lo diga y lo arreglamos», señaló entonces el capitán del conjunto madridista.
Ante el Atlético, Ramos no estuvo sobre el césped por lesión y el árbitro demostró que, más allá de tener un problema con el central madridista, parece tenerlo con el propio club. De nuevo sus actuaciones le vuelven a costar puntos al Real Madrid y, otra vez, ante un rival directo, como en los últimos años ha sucedido en cada Clásico en el que ha estado al mando.