Dean Huijsen apenas lleva disputados 180 minutos como jugador del Real Madrid y ya parece que lleva toda la vida vistiendo la camiseta blanca. El central malagueño se ha convertido en la sensación del equipo de Xabi Alonso en este Mundial de Clubes destacándose como una pieza indiscutible en el esquema del técnico tolosarra.
El internacional español está aportando al Real Madrid una serie de cualidades que no tenía en sus últimas plantillas destacando una impoluta salida de balón y con las dos piernas. Huijsen está demostrando que desde la defensa puede ejercer como un mediocentro más para el equipo blanco gracias a su buen criterio en la salida de balón y una visión que le permite superar líneas rivales con suma facilidad.
Con apenas 20 años, Huijsen está impresionando a propios y extraños que ven en él un auténtico seguro en la defensa y sobretodo vislumbran que hay un jugador con jerarquía y tablas para pensar en él como el líder de la zaga blanca en el medio plazo.
En el presente Mundial, el jugador lidera al Real Madrid en pases de ruptura de línea rival con 31 y siendo 11 de ellos en el último tercio del campo. Además, ha completado 127 pases exitosamente por encima de 95% de acierto, ha realizado 10 despejes, seis de ellos de cabeza, y ha ganado 12 duelos en una muestra de apenas dos encuentros.
Adaptación express de Huijsen
Conforme vaya cogiendo más experiencia, Huijsen aspirará a asumir un rol que en su momento tuvieron otros españoles como Sergio Ramos o Fernando Hierro, quienes destacaban por la similitud con sus facultades. Por el momento, las sensaciones no pueden ser mejores tras haber sabido amoldarse a una situación que tampoco ha sido nada sencilla con los problemas que ha vivido Raúl Asencio en estos encuentros y que le han señalado de cara al madridismo.
Huijsen se ha mantenido ajeno a esas situaciones y ha demostrado estar por delante en la rotación demostrando una adaptación casi inmediata al equipo. Otros fichajes de centrales recientes como Eder Militao o Antonio Rüdiger tardaron mucho más tiempo en encontrar su sitio y su puesto como titulares indiscutibles en el equipo.
En el caso del central de ascendencia neerlandesa, su aterrizaje ha sido perfecto en un Real Madrid que necesitaba sabia nueva para su defensa. Huijsen no es sólo un defensa, sino una salida de juego en si mismo que combina una impresionante habilidad para el despeje y para ganar duelos. El cielo parece ser el límite de un jugador por el que 60 millones hasta parece un precio asequible visto lo visto.
