Florentino Pérez hizo acto de presencia en el hotel de concentración del Real Madrid en Sevilla poco antes de las 11:30 horas. El máximo mandatario blanco llegó a la capital andaluza junto a los lesionados Carvajal, Militao y Camavinga. El presidente fue recibido por un nutrido grupo de madridistas que estaban presentes en el cuartel general de los hombres de Carlo Ancelotti en las horas previas a la final de la Copa del Rey.
Hay que recordar que la jornada del viernes fue muy intensa. Las horas previas a la final de la Copa del Rey que enfrenta a Barcelona y Real Madrid han sido frenéticas. Los blancos consideraron inadmisible que los árbitros de la final se manifestasen en contra de uno de los equipos antes del encuentro, por lo que, si no tomaban medidas contra ellos, a pesar de lo que reza el comunicado oficial, voces autorizadas del club tenían claro que no iban a jugar la final. De hecho, tenían planeado que el equipo, de tomar esta decisión, abandonase Sevilla en la mañana del sábado.
Hay que recordar que en las últimas horas el Real Madrid ya había plantado a la Federación en todos los actos previos a la final de la Copa del Rey. Nadie habló en la rueda de prensa, ni Ancelotti ni Modric, no entrenaron en La Cartuja y nadie representó a los blancos en la cena oficial que se celebró en el Real Alcázar de Sevilla, donde sí acudieron Laporta, Louzán y Medina Cantalejo, entre otros.
Finalmente, en la noche del viernes imperó el sentido común y todo se encauzó. El Real Madrid emitió un comunicado oficial en el que aseguraba que nunca se había planteado no presentarse a la final y las aguas regresaron a su cauce. Por lo tanto, Sevilla disfrutará de un Clásico copero muy emocionante.