El Real Madrid vio cómo le robaban un penalti en el Santiago Bernabéu en el partido de vuelta de los octavos de final de la Champions League. Corría el minuto 27 cuando Vinicius robó un balón cerca del área del PSG y prolongó para que Alaba centrase dentro del área sin encontrar ningún compañero blanco. La jugaba parecía normal y corriente, pero ni mucho menos fue así.
El central madridista, en el momento de su centro, fue pisado por un Marquinhos que quiso interceptarlo in-extremis. El jugador brasileño pisó claramente al jugador del Real Madrid, quien incluso tuvo que ser asistido por los médicos por una torcedura leve en su tobillo izquierdo.
Era lógico que Danny Makkelie no viese ese penalti, pero el VAR podía haber intervenido tras demostrarse que existe contacto con Alaba en la continuación de la jugada. Los blancos tienen motivos para quejarse porque el videoarbitraje debería haber tomado cartas. Por menos se han visto penaltis esta temporada en la Champions. A Ceferin no le interesó.