Dani Ceballos está convenciendo a Carlo Ancelotti. La lesión que sufrió en el primer partido de los Juegos Olímpicos ante Egipto ya es historia. Frente al Alcoyano pudo jugar unos minutos, mientras que ante el Valencia en el Santiago Bernabéu el italiano decidió que el utrerano fuese el primer cambio del partido. Entró al césped en el minuto 70 por Luka Modric y demostró que sigue creciendo. Pidió el balón, intervino en distintas alturas del campo y sumó tanto en control como en aceleración y desequilibrio, dejando claro que tiene sitio en este Real Madrid. El andaluz quiere tener, como mínimo, la oportunidad y para ello se está machacando en Valdebebas, donde lo deja todo en cada entrenamiento.
Ceballos lo ha pasado francamente mal desde que su tobillo se rompió ante Egipto. Intentó volver a participar en los Juegos rozando la temeridad para poder ayudar a sus compañeros en la final ante Brasil. Obviamente, era imposible. Después, tras regresar a Madrid y que los servicios médicos del club blanco confirmasen que sufría un esguince de grado III, con una rotura completa del ligamento peroneo-astragalino anterior y del peroneo-calcáneo, además de un complicado edema óseo, comenzó un calvario que le llevó a buscar diferentes soluciones, a desesperarse en algún momento y a sufrir mucho, pero finalmente todo esfuerzo tiene su recompensa y a final de año empezó a ver la luz al final del túnel.
Ante el Cádiz en el Santiago Bernabéu estuvo sentado por primera vez en el banquillo. Aquella noche no jugó, pero tras todo el camino recorrido ya era un paso importante. Una sobrecarga le apartó de San Mamés, mientras que con la llegada de 2022 volvió a jugar. Ahora, su reto es seguir demostrando a Ancelotti que puede contar con él. La CMK es fija, pero Modric necesita un recambio y con Fede Valverde sin terminar de asentarse tiene una oportunidad de encontrar su sitio. Tanto el italiano como el cuerpo técnico están alucinando con la manera de entrenar de un jugador que no va a salir en este mercado de invierno y que por delante tiene media temporada para cambiar su historia en el Real Madrid. La confianza del entrenador la tiene.
Los retos de 2022
Ceballos tiene por delante dos grandes objetivos para este 2022. Por un lado, tiene que seguir trabajando para hacerse con un papel importante en la plantilla del Real Madrid que le permita de gozar de minutos. Parece complicado que pueda ser titular, pero sí tiene la posibilidad de ser una de las primeras opciones de Ancelotti, lo que le permitiría jugar mucho.
Si consigue esto, el siguiente objetivo es recuperar la confianza de Luis Enrique. El asturiano ha contado con él cuando ha tenido regularidad, pero no juega con España desde octubre de 2020. Si es capaz de tener protagonismo en el Real Madrid, las puertas de Las Rozas estarán más cerca de abrirse y, quién sabe, si su presencia en el Mundial de Qatar empieza a verse como una opción real.
