Ancelotti se desespera con Camavinga
Camavinga fue uno de los jugadores más señalados de la derrota del Real Madrid ante el Leipzig. La indisciplina táctica del francés, que ya le ha costado incluso algún toque de atención de su seleccionador, empieza a desesperar a Ancelotti, que ve al joven centrocampista más como un revulsivo que como una opción de ser titular en los grandes partidos. A su favor, su insultante juventud y que tiene tiempo de sobra para mejorar.
El día después de la primera derrota en 20 partidos oficiales (desde la temporada pasada en el campo del Manchester City) dejó al Real Madrid con una sensación de escozor pero no de crisis. Y a Eduardo Camavinga como uno de los jugadores más señalados. Desubicado y perdido en el campo, intentó abarcar más sitio del que le correspondía. Se desordenó él y al resto. Entre Kroos y Tchouaméni tuvieron que llenar sus vacíos.
Y no es la primera vez que Camavinga naufraga como titular, algo que empieza a incomodar a Ancelotti, que cada día ve más al francés como un jugador ideal para salir desde el banquillo pero no desde el inicio. La temporada pasada ocurrió algo similar y Camavinga, tras ser titular en las derrotas ante el Espanyol y el Sheriff en octubre y noviembre, no volvió a jugar un partido de inicio hasta marzo e incluso tuvo opción de irse cedido en el mercado de enero, pero el Real Madrid se cerró en banda.
Pecados de juventud
Esta temporada Camavinga ha sido titular en dos partidos de Champions, ambos frente al Red Bull Leipzig, y sólo en tres de Liga, frente a Celta, Betis y Getafe. Además, sólo ha disputado los 90 minutos en la derrota del Real Madrid en Alemania. Su figura se agiganta cuando sale desde el banquillo y se achica cuando empieza el partido como titular.
Desde el entorno de Ancelotti aseguran que Camavinga “quiere hacer demasiadas cosas” y que eso le lleva a desordenarse en el campo. Carlo y, especialmente, Davide Ancelotti están muy encima del centrocampista francés y no paran de insistirle en que “quien intenta estar en muchos sitios del campo al final no está en ninguno”. Saben que tiene un potencial gigantesco tanto por su tremendo físico como por su habilidad con el balón, pero aún tiene que aprender muchos conceptos tácticos para hacerse un sitio en un equipo de primer nivel como el Real Madrid. Eso sí, tiempo tiene de sobra.