Arbeloa ha conseguido hacer un equipo sólido que se sustenta en una serie de valores que lleva a rajatabla. Los jugadores del Real Madrid tienen que serlo dentro y fuera del campo, todos tienen que tener como gran reto llegar al primer equipo, jugar a «todo gas» durante los 90 minutos y que todos se impregnen del sentimiento madridista. Quiere un equipo que sienta al máximo la camiseta.
Pero además, sus equipos juegan muy bien al fútbol, gracias a un grupo de jugadores que quieren derribar todas las puertas. Esa generación de 2004 que el propio Carlo Ancelotti ha llegado a destacar en ruedas de prensa del primer equipo. En Valdebebas hay puestas muchas esperanzas en estos jugadores, que están en las mejores manos.