Un pistolero asalta el Palacio
El Real Madrid ha sucumbido frente al Joventut de Badalona en el primer partido de semifinales de la Liga Endesa (83-93). La excepcional actuación de Kyle Guy, autor de 30 puntos puntos y 8 triples, enterró al campeón de Europa, impotente para frenar a un pistolero demoledor. El dominio bajo los aros de Walter Tavares (18 puntos, 14 rebotes) y las ganas de Dzanan Musa (18) no impidieron que los blancos se condenen a intentar la enésima remontada de la temporada. La labor empezará el jueves en el mismo escenario.
La actuación de Guy fue de esas que no se olvidan fácilmente. Llegó al descanso sin hacer ruido con seis puntos, pero en la segunda mitad añadió otros 24 con otros siete triples. El Madrid conservó todas sus opciones intactas hasta el ecuador del último parcial (73-73), pero el huracán de Indianápolis se lo acabó llevando por delante. Acabó aplaudido por la afición blanca. Bien merecido.
Después de barrer al Gran Canaria en cuartos, el Madrid mantuvo la inercia en el estreno de estas semifinales. Con Hanga al mano, empezó como una moto y en apenas tres minutos ya dominaba por 10 puntos (13-3). El partido amenazaba con romperse demasiado pronto, pero el Joventut pronto se puso las pilas. Un equipo que se había cargado al Baskonia por la vía rápida no podía reducir su rol al de mera comparsa.
Se activó Tomic, el incombustible Tomic siempre pitado en su antigua casa, y a su vera también lo hizo Joel Parra. Un triple del internacional español coronó un parcial de 0-7 y devolvió a la Penya al encuentro. El Madrid se estiró un poco más antes de finalizar el primer cuarto, cerrado con un triple a la desesperada de Kyle Guy que no entró. El estadounidense se redimiría en la jugada final del segundo cuarto.
Antes, Hezonja le puso un taponazo y le dijo que no con el dedito al hombre que le metió 58 puntos al Baskonia en cuartos de final. Con Tavares en el banquillo y Randolph como 5 de emergencia una vez más, el Madrid no dominaba por dentro ni tampoco mostraba finura en el lanzamiento exterior (3/17 en triples). Lo contrario que Vives, con un triple del base se puso por delante el Joventut por primera vez (31-32). Y sobre la bocina del primer tiempo, esta vez sí, escopetazo de Guy (39-42).
Guy lo incendia todo
Fue el aperitivo del festival que desató el norteamericano nada más volver de vestuarios. Enchufó tres triples seguidos, uno con tiro libre adicional tras falta, 10 puntos en menos de cuatro minutos para abofetear al Madrid. Tan excitado estaba el Joventut que hasta Tomic se atrevió a lanzar de tres y para adentro. Con un contraataque de Parra, los verdinegros terminaban de silenciar el Palacio creciendo hasta el +12 (47-59, min.26).
Tavares imponía su ley interior como de costumbre, pero necesitaba ayuda desde el exterior para labrar la remontada y la encontró con Musa y Hezonja. Balcánicos al rescate para ajustar la mirilla desde el perímetro y despertar a la hinchada blanca. En un arranque de furia, la brecha estaba casi cerrada a falta del último parcial (64-67).
Con el marcador ya equilibrado a falta de 6 minutos para el final (73-73), volvió Guy a cancha y lo primero que hizo fue clavar otro triple. Se comportaba como el dueño del partido y el Madrid necesitaba frenarlo, pero fue inteligente para pasar la pelota a sus compañeros cuando llovían las ayudas defensivas a su alrededor. Su inteligencia guió otro acelerón visitante.
Un día más, el campeón de Europa llegaba contracorriente al desenlace de un partido: 75-83 a falta de 2:51. Terreno abonado para otra remontada de las que tanto gustan en la casa blanca, pero Guy se deshizo de Rudy Fernández, lanzó solo desde la esquina y chof. Su séptimo triple. Luego se refociló con el octavo. La primera gran sorpresa de semifinales era una realidad.