Aleix Espargaró se impone a Bagnaia en la última vuelta y Márquez se vuelve a caer

Aleix Espargaró ha conseguido una victoria espectacular, la segunda de su carrera en MotoGP, en el GP de Gran Bretaña. Las mejoras que ha traído Aprilia en Silverstone han surtido efecto y el español se impuso a Bagnaia en una última vuelta de infarto. Tercero fue Binder, que se llevó el gato al agua en la lucha por el podio contra Oliveira, cuarto, y Maverick Viñales, quinto. Marc Márquez se volvió a caer y sigue sin terminar una carrera el domingo.

El cielo estaba nublado, caían algunas gotas que amenazaban la carrera pero finalmente se corrió en seco después de una sprint race pasada por agua. Sólo fueron cuatro gotas. Esta vez sí que salió bien Bagnaia que pasó a Álex Márquez en la primera vuelta. El ganador de la sprint race cerró los espacios al líder del campeonato y acabaron tocándose en las primeras curvas. Este toque benefició al italiano que ascendió hasta la tercera posición.

Márquez también ganó alguna plaza en la salida, igual que Quartararo que subía ocho posiciones. La cruz fue Jorge Martín. El piloto de Ducati se tocó con Binder al intentar pasarle por fuera en el primer giro y se tuvo que ir fuera de la pista. El español salía séptimo y cayó hasta el puesto número 21 tras el toque. Eso condenó al del Pramac para el resto de la carrera. Poco después, antes de encarar la segunda vuelta, Bagnaia le devolvió el adelantamiento a Miller y se puso primero.

Por detrás, Álex Márquez, Maverick Viñales y Aleix Espargaró aguantaban el ritmo de los tres primeros y se mantenían en el grupo de cabeza. Mack se tiró con todo a por Miller y obligó al australiano a irse fuera de la pista para evitar el toque. Eso lo aprovechaban Álex Márquez y Aleix para superarles y coger algo de ventaja. Por detrás, Joan Mir se iba al suelo cuando apenas iban dos vueltas de la carrera. El piloto de Palma regresaba en este Gran Premio tras varias pruebas fuera por lesión. Es su decimotercera caída en nueve carreras.

En la vuelta seis era Álex Márquez quien tenía que abandonar por problemas con el cambio, como consecuencia del toque con Bagnaia, cuando se encontraba peleando por el podio con Aleix. Mientras tanto Bezzecchi marcaba vuelta rápida y reducía distancias con su amigo Pecco. El del Mooney VR46 Racing Team estaba yendo al límite en su persecución por alcanzar al líder del campeonato y vigente campeón del mundo.

El italiano ya se había llevado un susto en la vuelta cinco al alargar la frenada y en la sexta se fue al suelo al intentar forzar para alcanzar a su compatriota. Aleix lo vio y tiró con todo para cazar a Bagnaia mientras Viñales le metía la moto a Binder y se colocaba tercero. En la vuelta 13 todo cambió. Empezaron a aparecer las primeras gotas y esta vez vez las nubes venían cargadas con algo más que cuatro gotas. Los comisarios sacaron la bandera blanca que indica que los pilotos podían entrar a cambiar la moto si querían.

Otro domingo sin puntuar para Márquez

Dos vueltas después empezó a llover con más fuerza y llegaron las primeras caídas. Marc Márquez y Enea Bastianini se iban al suelo en la curva 12 a seis giros del final tras un incidente entre ambos. El de Ducati continuó aunque acabó retirándose poco después pero el de Cervera no pudo seguir. Otro domingo más que el ilerdense se marcha de vacío y otro domingo más que no consigue acabar la carrera.

Ese era su objetivo y no pudo conseguirlo. Un toque con Enea le impidió terminar el GP de Gran Bretaña. Por delante, Oliveira aprovechaba la lluvia para colocarse en posición de podio. El portugués, que salía decimosexto, estaba rodando en 2:02 y se metió de lleno en la pelea por la victoria. Pese a los intentos de todos, Bagnaia se hacía fuerte en esa primera posición y resistía ante los diferentes ataques.

Pero Aleix tenía un as guardado bajo la manga. El piloto español se lo fue cocinando a fuego lento, vuelta a vuelta. Mientras tanto, por detrás, Viñales, Oliveira y Binder se pegaban por la última plaza del podio, el mayor de los Espargaró se acercó mucho a Pecco en la última vuelta y consiguió superarle con un adelantamiento magistral. Luego, el español se centró en cerrar todos los huecos posibles para acabar logrando la segunda victoria de su carrera en MotoGP. Binder se llevó la lucha por el podio y acabó tercero.