La cita era el corazón de Milán, la capital mundial del diseño. La expectación era máxima. En la emblemática y lujosa calle Monte Napoleone, en el Café illy, se presentaba la Re-Chair, la nueva apuesta de diseño sostenible de la firma: la silla creada por Antonio Citterio para illycaffè. Todo un éxito. «He diseñado esta silla en polipropileno reciclado, que es parte de mi investigación sobre la sostenibilidad, que no es una tendencia, una moda, sino que es una realidad económica», explica el prestigioso arquitecto a COOL durante el evento de presentación.
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«Se ha utilizado la cápsula reciclada para diseñar la estructura de esta silla porque la sostenibilidad es un valor muy importante para illycaffè. Como novedad, este año lanzamos la silla en colores nuevos y también presentamos la Eleganza de Phillipe Starck», dice Cristina Scocchia, la CEO de la empresa, a COOL .
Porque illycaffè no solo es el mejor café del mundo para los más cafeteros, sino que es una empresa familiar que cumple 90 años en manos de la tercera generación de una misma familia, los Illy. Desde la ciudad de Trieste, donde se fundó en 1933, hasta hoy en día, mantienen su fórmula de café tan intacta y secreta como la de la mismísima Coca Cola. Calidad, arte y sostenibilidad son sus tres pilares irrenunciables. La Re Chair es un buen ejemplo de ello.
La Re-Chair
Una pieza muy especial, que está hecha con cápsulas de café usadas, totalmente sostenible y en varios colores, desde el verde al negro pasando por blanco y el gris. Un diseño que está disponible en las tiendas Kartell para su venta. «La calidad es parte del ADN de la compañía y queremos hacer llegar esa calidad a más 140 países. La sostenibilidad es un ejemplo de nuestros valores. Creemos en la belleza, la sostenibilidad y el diseño y la Re – Chair es precisamente eso», comenta Cristina Scocchia en Milán a COOL.
Antonio Citterio, el diseñador
Es uno de los más prestigiosos arquitectos italianos. Antonio Citterio nació en la ciudad italiana de Meda en 1950. Fundó su propio estudio en 1972 y se licenció en Arquitectura en la Universidad Politécnica de Milán en 1975. Es un grande del diseño; en la actualidad trabaja en diseño industrial con empresas tales como Ansorg, Arclinea, Axor-Hansgrohe, B&B Italia, Flexform, Flos, Hermès, Iittala, Kartell, Maxalto, Sanitec, Technogym y Vitra. Ha recibido numerosos premios. En COOL hablamos con él.
Sobre la silla, Citterio revela a COOL la dificultad en el proceso de elaboración con un material reciclado, el polipropileno .«Para mí el producto reciclado es un proceso diferente y hay que pensar en el reciclado del producto final, cuando la silla está hecha. El producto se convierte en algo diferente. La dificultad es cuando trabajas con materiales reciclados, como el plástico, es que la estructura es totalmente diferente que cuando tienes el material original. Elegir el color no es un problema, depende de dónde lo quieras utilizar. Este es un producto reciclado, hecho con cápsulas de café recicladas y la estética depende de los gustos», sonríe.
Durante la puesta en sociedad, también se desveló el nuevo diseño creado por Phillipe Starck. Una pieza tapizada en tela color teja y con la patas sostenibles .
Apoyando siempre la economía circular, con motivo del Salone del Mobile 2023, Kartell e illycaffè aprovecharon también para el lanzamiento de la butaca Eleganza, en las versiones de ELA y NIA con dos colores diferentes, diseñadas por Starck. La novedad de este año es que su estructura está hecha con el sistema de reciclaje de las cápsulas Iperespresso de Illy.
Dos marcas de excelencia Made in Italy contribuyendo a la sostenibilidad del planeta a través de reforzar modelos de producción de economía circular.
«La pasión siempre nos lleva a dar un paso más allá en búsqueda de nuevos materiales, de soluciones tecnológicas y procesos de producción cada vez más eficientes y sostenibles”, explica Lorenza Luti, directora de Marketing y Retail de Kartell.
«Promover la transacción hacia un modelo de economía circular es ahora un factor esencial para salvaguardar el futuro de nuestro planeta», dice Cristina Scocchia, CEO de illycaffè .
«Junto a Kartell, con quien compartimos la necesidad de una transición hacia sistemas cada vez más sostenibles y la capacidad de aunar esfuerzos y conocimientos mutuos para la protección del bien común, hemos logrado poner en práctica soluciones que han transformado materiales que han llegado al final de su ciclo de vida en un nuevo producto de diseño», concluye.
La empresa
El húngaro Francesco Illy llega a Trieste después de la primera guerra mundial, tras estudiar economía en Timişoara y haber trabajado en Viena. Ingenioso y cosmopolita, se enamora de la ciudad y de una mujer, y se convierte en ciudadano de Trieste.
Empieza a trabajar en el campo del cacao y el café, que desde todo el mundo llegan al puerto de Trieste. En 1933 funda illycaffè, a partir de un sueño: ofrecer el mejor café del mundo.
illycaffè en 1934, obtiene la patente para el revolucionario sistema de presurización, utilizado hasta el día de hoy por la empresa para el envasado de sus productos: de esta forma el café puede viajar a todo el mundo, acentuando sus aromas gracias a la maduración y preservando su frescura.
Ernesto, hijo de Francesco, se licencia en química y entra en la empresa a finales de los años 40. En los años ’50 la empresa se expande y empieza a vender también envases más pequeños de café molido para el consumo doméstico. En 1965 se traslada a Via Flavia.
En 1974, illy ofrece el café en monodosis. En 1988 deposita una patente para la selección digital de los granos, que permite escoger, uno a uno, solo aquellos perfectos.
En los años 90 aparecen las tazas illy Art Collection, el nuevo logotipo, y el Premio Brasil para la excelencia en el cultivo del café. Andrea, uno de los hijos de Ernesto, se encarga de la dirección de la empresa. Un empresa que mantiene su fórmula en secreto: mezcla nueve cafés de diferentes partes del mundo y hace lo imposible por proteger las plantaciones. La sostenibilidad, la calidad y el arte son sus palabras mágicas.
