Disfrutar de la naturaleza, la gastronomía y la cultura en estas siete Posadas Reales de Castilla y León

Cuando viajamos buscamos sentirnos en espacios únicos, cómodos, originales y donde, además, nos cuiden con excelencia. Por ello, os vamos a recomendar algunas propuestas para que organicéis una escapada de fin de semana o de días, como queráis, por los mejores alojamientos rurales de Castilla y León, esos que tienen el cartel de Posadas Reales, la marca de calidad de los alojamientos de la región que nos garantizan un tiempo de ocio de calidad y bienestar.

Debemos saber, en primer lugar, que hay una Posada Real para cada tipo de cliente y un sinfín de actividades, experiencias y propuestas que hacen de esta marca un verdadero motor del turismo castellanoleonés. Vayamos a la provincia que vayamos, encontraremos una Posada Real que estará encantada de recibir a sus nuevos huéspedes.

Una de las cosas más llamativas de estos espacios de Posadas Reales es que tienen arquitecturas muy singulares como, por ejemplo, palacios, molinos, castillos o monasterios, entro otros, que han sido adaptadas para alojar con la máxima confortabilidad a los visitantes del S. XXI.

Decenas de planes al aire libre y buena gastronomía

En Ávila podemos disfrutar de La Posada del Infante, un encantador y elegante espacio rústico situado en la localidad de Arenas de San Pedro, donde el cliente encontrará la paz que ansía durante sus vacaciones. El restaurante tiene una gran chimenea y ofrece una gastronomía típica de la zona combinada con una cocina de autor basada en materias primas de alta calidad. Entre sus especialidades destacan, el revuelto de habitas y morcilla de calabaza, la tradicional carne Avileña y como postre está de diez el flan de queso con salsa de membrillo.

Alrededor se puede hacer senderismo y rutas en bicicleta para contemplar paisajes como el Barranco de las Cinco Villas, la Calzada del Pico, etc. Así como ver repertorios monumentales como el Castillo de la Triste Condesa o el Santuario de San Pedro de Alcántara, dos sitios que merecen la pena.

En León nos conquista El Rincón de Babia, situado en el pueblo más alto de la provincia de León, La Cueta, en la comarca de “Babia”. Es conocido, sobre todo, por haber servido de lugar de descanso a los Reyes de León a partir del S. X. Cuenta esta Posada Real con doce habitaciones, ocho dobles, y cuatro cuádruples, todas con vistas a las montañas.

En cuanto a la gastronomía, los platos tradicionales con algún toque innovador que dan como resultado empanadillas de morcilla con puré de maíz, croquetas de cecina de León, tarta de castañas con chocolate caliente, etc.

Santa María la Real, entorno monacal

En Palencia, al norte de la provincia, os proponemos la localidad de Aguilar de Campoo, centro neurálgico del románico norte, donde encontramos la Posada de Santa María la Real, dentro del complejo turístico del Monasterio Santa María La Real, instalada en lo que fueran las dependencias agrícolas (aperos y almacenes de grano) del Monasterio del S. XII.

En la planta baja se han ubicado la recepción, un bar, una sala de lectura con chimenea y el restaurante con distintivo de calidad micológico y una elaborada cocina donde no faltan los platos de cuchara más tradicionales. Los clientes, además, disfrutarán de visitas guiadas al Monasterio y al Museo del Románico ROM. Mientras que en la localidad, podréis disfrutar de monumentos como la colegiata de San Miguel, la iglesia de Santa Cecilia, o los restos del castillo y las antiguas puertas medievales de entrada.

Esta localidad también se puede tomar como punto de partida para realizar la ruta del románico norte, una propuesta abarca un conjunto de templos románicos del norte de Palencia, provincia que tiene la mayor concentración de iglesias románicas de Europa. En torno a las localidades de Aguilar de Campoo y Cervera de Pisuerga, se concentran más de un centenar de templos románicos, desde espectaculares monasterios hasta pequeñas ermitas, todos ellos rodeados de gran belleza.

En Salamanca os proponemos la Posada Real del Castillo del Buen Amor, un espacio único ubicado en el pueblo de Topas que nos hará disfrutar durante cualquier época del año. La estancia la pasaréis en un castillo-palacio del S. XV construido sobre una fortaleza anterior del siglo XI, conocido así por ser la morada del Obispo Alonso de Fonseca Quijada, de su amante Teresa de las Cuevas y de los cuatro hijos que tuvo con ella.

Esta Posada Real, estructurada en torno al patio gótico central, brinda la posibilidad de disfrutar de la quietud del entorno, con la naturaleza a sus pies y, además, y de buenos platos en su restaurante, ubicado en las antiguas caballerizas. Entre sus especialidades destacamos el risotto de hongos y trufa o la hamburguesa de Wagyu “Buey de Kobe”.

En Segovia, en esta ocasión, nos vamos a alijar en el Caserío de Lobones, a sólo 9 kilómetros de la ciudad de viaducto. Sus orígenes se remontan al S. XVII. Tras una minuciosa y delicada restauración se ha convertido una elegante y acogedora posada donde quedarnos a pasar unos días, disfrutando de la naturaleza y su cuidado diseño y decoración.

El Caserío de Lobones ofrece una cocina casera y cuidada, con desayunos con croissants y bizcocho casero. El servicio, uniformado y con guantes blancos, sirve las viandas con la pulcritud y oficio que exige el lugar. Desde el Caserío se pueden realizar visitas históricas a Segovia, así como a pueblos cercanos de gran interés histórico-artístico como la Granja de San Ildefonso, Pedraza, etc.

En Soria nos vamos a quedar en la Real Posada de La Mesta, un edificio de 1729 y es la construcción más notable del conjunto urbano de Molinos de Duero, centro destacado de la Real Cabaña de Carretería, y uno de los pocos ejemplos representativos que se han conservado de las casonas típicas de esta Sociedad.

En su restaurante, el Quinto Sabor, tanto para huéspedes como para público en general, se rinde culto a la gastronomía autóctona de alta calidad. Las estrellas de la carta son las variedades micológicas más valoradas, los escabechados de caza, los embutidos sorianos, la matanza, las verduras frescas de la huerta navarra, el foie y otros derivados del pato, los cangrejos de río, el cordero lechal y las carnes rojas a la brasa, sin olvidar la afamada trufa negra de Soria, junto con postres caseros y una extensa carta de vinos. ¡A disfrutar!

Por último, destacamos la estancia en la Posada Monte de la Reina, un auténtico paraíso que tenéis que descubrir en Zamora. Un palacio neogótico del S. XIX lleno de historias que ha perdurado durante años hasta convertirse en un espectacular hotel boutique. A pocos metros están situadas las bodegas, donde se elaboran una gran variedad de vinos amparados bajo la DO Toro.

En este impresionante alojamiento se organizan multitud de actividades al aire libre ya que se encuentra en el punto de partida de algunas de las rutas de senderismo más bonitas de la zona, así como experiencias enoturísticas en sus bodegas y viñedos.

Aprovechad, además, vuestra estancia en Posadas Reales para conocer todos los planes que hay alrededor del vino en Castilla y León. La región es la comunidad española líder en Rutas del Vino certificadas por ACEVIN (Asociación Española de Ciudades del Vino), contando con nueve Rutas del Vino.

Toda la lista de Posadas Reales se pueden consultar aquí.