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El pueblo favorito de los franceses está a 30 km de España: famoso por su legado artístico

  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

Collioure, un encantador pueblo en la Côte Vermeille, ha sido elegido como el favorito de los franceses en 2024, gracias a su rica historia, pintorescas calles y gastronomía local. Situado en los Pirineos Orientales, este pequeño municipio tiene profundas raíces históricas que se remontan al siglo IX, cuando fue un importante puerto bajo el Reino de Aragón. Sus calles están llenas de historia, con monumentos que revelan su pasado romano, medieval y su rol en conflictos franco-españoles.

Entre los lugares más destacados se encuentran el Castillo Real, antigua residencia de los reyes de Mallorca, y la Iglesia de Santa Maria, reconstruida en 1684 tras ser dañada en conflictos entre Francia y España. Además, Collioure es conocido como la cuna del fauvismo, un movimiento artístico del siglo XX, con museos que celebran la obra de artistas como Matisse y Derain. El puerto deportivo y sus playas, junto con las colinas circundantes, ofrecen un paisaje idílico que sigue inspirando a visitantes y artistas.

Collioure es el pueblo favorito de los franceses

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Collioure es un encantador pueblo costero que invita a descubrir su rica historia y su vibrante escena artística. Paseando por sus pequeños callejones peatonales, rodeados de casas con fachadas coloridas y balcones floridos, uno puede apreciar la arquitectura que refleja las diversas ocupaciones que ha tenido a lo largo de los siglos. El antiguo recinto medieval es un testimonio de su pasado, mientras que el puerto deportivo se ha convertido en un emblema para paseos junto al mar, lleno de vida y un lugar de inspiración para pintores que buscan capturar la esencia del lugar.

Además de su belleza arquitectónica, Collioure es famosa por sus anchoas. Los visitantes pueden detenerse en los restaurantes y tiendas del paseo marítimo para degustar esta delicia local o visitar los talleres artesanales que perpetúan las antiguas tradiciones de elaboración. El Castillo Real de Collioure, del siglo XIII, es otro de los principales atractivos. Este castillo, que en su día fue residencia de los reyes de Mallorca y luego prisión durante la «Retirada», ofrece un viaje fascinante a través de la historia. Collioure también ha sido cuna del fovismo, y los amantes del arte pueden seguir las huellas de artistas como Matisse y Derain, visitando el Museo de Arte Moderno y la Casa del Fovismo.

Lugares de interés

Collioure es un destino fascinante que destaca por su rica historia artística, especialmente en el ámbito del fauvismo. Los visitantes pueden seguir los pasos de Henri Matisse y André Derain recorriendo las reproducciones de sus obras en las coloridas calles del pueblo. Las numerosas galerías de arte invitan a sumergirse en el talento y la creatividad de los artistas locales, mientras que el ambiente artístico se respira en cada rincón de esta localidad costera.

Además de su historia artística, Collioure ofrece un viaje en el tiempo con sus numerosos lugares históricos. Entre las fortificaciones del pueblo destacan el Castillo Real y la Capilla de San Vicente, ambos con impresionantes vistas al Mediterráneo.Descubrir estos monumentos, junto con paseos por el puerto y las playas, permite descubrir la conexión entre el pueblo y su pasado, desde la época medieval hasta las disputas entre Francia y España.

Los amantes de la naturaleza también encontrarán en Collioure un verdadero paraíso, con rutas de senderismo que recorren los viñedos en terrazas y la costa de Vermeille. Las calas escondidas y playas cercanas ofrecen paisajes de ensueño, ideales para relajarse. Finalmente, no se puede dejar de degustar las especialidades locales, como las famosas anchoas de Collioure, maridadas con vinos AOC de la región, que hacen de este destino una experiencia culinaria inolvidable.

Historia

Collioure vivió una época de gran esplendor cuando formó parte del Reino de Mallorca y, más tarde, del Reino de Aragón. Durante estos periodos, se reforzó su puerto y castillo, convirtiéndose en un enclave estratégico. Tras la unificación de España, Collioure permaneció bajo dominio español hasta 1659, cuando Francia lo anexó junto al resto del Rosellón, generando tensiones entre ambas naciones.

En el siglo XX, Collioure se transformó en un importante centro artístico. Pintores como Henri Matisse, Georges Braque, André Derain y Picasso encontraron inspiración en su belleza natural y en la vida cotidiana del lugar. Este legado artístico se refleja en la Senda del Fauvismo y en el Museo de Arte Moderno. Además, Collioure fue refugio para el poeta español Antonio Machado, quien se exilió allí tras la Guerra Civil Española.

En resumen, Collioure, con su rica historia y legado artístico, es un destino que celebra su pasado y enamora a todos los visitantes.