Las gafas VR Oculus Rift salen a la venta por 700 euros

Por fin ha llegado el esperado momento en el que Oculus ha anunciado en CES 2016 la versión final de sus gafas de realidad virtual, las Oculus Rift, y para decepción de la mayoría van a ser un producto muy caro: 600 dólares en EEUU y, si los quieres comprar desde nuestro mercado, deberás pagar nada menos que 700 euros más los gastos de envío. La comunidad de entusiastas no ha tardado en mostrar un enfado descomunal por el elevado precio del kit (que incluye también auriculares, un mando de Xbox y un par de juegos creados especialmente para las Rift) al que hay que sumar el precio del ordenador PC mínimo que necesitarás para usar el sistema y que ronda unos 1.000 euros. La mayoría de los que esperaban la versión final de las Oculus Rift no comprenden cómo es posible que sean mucho más caras que el último kit de desarrollo vendido por Oculus (las llamadas DK2) que costaba unos 400 dólares. La polémica con respecto al precio ha sido tal que el propio Palmer Luckey, fundador de Oculus, se ha tenido que disculpar en distintos foros por no haber sabido manejar la información con respecto al precio de las gafas de realidad virtual.

Según Palmer Luckey, las Oculus Rift en versión final son sustancialmente más caras que la versión DK2 para desarrolladores porque, en lugar de componentes “estándar” como los paneles u otros elementos de la electrónica, usan hardware mucho más avanzado para una experiencia superior. Sin embargo, ha reconocido que ha “manejado de manera inadecuada el mensaje” sobre los precios ya que la mayoría de usuarios seguía pensando que estaría alrededor de los 350 dólares.

En cualquier caso, incluso con un precio de 600 dólares (o 700 euros para Europa), las primeras unidades de las Oculus Rift ya están agotadas y la fecha de entrega que se estima ya desde la página de compras se va hasta abril de 2016. Parece que Oculus tiene claro que en esta primera etapa no iba a tener problemas por el precio y entre los entusiastas que no miran el presupuesto y los miles de empresas que crean software y “experiencias” VR (cómo las que puedes ver en todo tipo de eventos para traer público) las ventas estaban aseguradas. Sin embargo, está claro que Oculus ha renunciado a la promesa de ofrecer “la realidad virtual para todos”.

El segundo elemento a tener en cuenta es además el PC necesario para usar las gafas. Según Oculus, el ordenador recomendado debe contar con procesador Intel Core i5-4590 o superior, 8 GB o más de RAM, sistema gráfico Nvidia GTX 970, AMD R9 290 o superior, salida de vídeo HDMI 1.3, tres puertos USB 3.0 más un puerto USB 2.0 y sistema operativo Windows 7 SP1 de 64 bits o posterior. Por si tienes dudas, en la tienda en línea de Oculus puedes descargar una aplicación para PC que revisará tu ordenador para comprobar si es compatible con las gafas.

Oculus promete por otro lado que en febrero lanzará ofertas de ordenador compatible más las gafas Rift con precios que partirán de los 1.500 dólares (entendemos que en este caso ya no habrá desviaciones tan escandalosas como en el precio de las gafas). En todo caso, en la página de Oculus puedes ver también algunos modelos de PC de sobremesa “recomendado” de fabricantes como Dell, Asus o Alienware con precios que parten de los 1.000 dólares.

Por último, hay otra decepción más para los que esperaban a esta versión final de las gafas de Oculus y es que el mando “Touch” específico para realidad virtual no está todavía disponible y su lanzamiento se anunciará a lo largo de este año.

Con el kit que acaba de ponerse a la venta se incluyen las gafas, el sensor de posición, los auriculares, un pequeño mando llamado Oculus Remote y un mando de Xbox One. Además, con el conjunto se suministran los juegos EVE: Valkyrie y Lucky’s Tale creados especialmente para las gafas.

Curiosamente, Oculus sí ha anunciado que los que apoyaron su proyecto original en la plataforma de financiación colectiva Kickstarter donde comenzaron las gafas, recibirán gratuitamente una unidad de esta versión final.

¿Y tú, crees que Oculus ha puesto demasiado caras sus primeras gafas VR o merece la pena pagar más por una experiencia más avanzada?