Los datos que demuestran el trato de favor de la Complutense a Begoña Gómez
Si el último máster que le quedaba a Begoña Gómez en la Universidad Complutense ha sido cancelado por falta de alumnos tendrá que explicar la docta institución académica que rige el rector Joaquín Goyache las razones que la llevaron a aprobar la creación de la cátedra de Transformación Social Competitiva, pese a que la mujer de Pedro Sánchez -que ni siquiera es licenciada- acreditaba un pobre balance en el máster que por entonces dirigía en este centro, el de captación de fondos.
El juez Peinado investiga si existió trato de favor en la creación de esta cátedra y ha solicitado a la Complutense, entre otros, el número de alumnos matriculados en las distintas ediciones de los másteres codirigidos por Gómez. Normal, porque según los datos a los que ha tenido acceso OKDIARIO, desde 2014 -fecha de inicio de este máster- hasta el curso 2019-2020, justo el previo a la concesión de la cátedra, apenas 54 alumnos habían cursado la titulación: ocho en el curso 2014-2015; 11, en 2015-2016; 10 en 2016-2017, otros 10 en 2018-2019 y 15 en el de 2019-2020.
La Complutense aprobó la creación de la cátedra -y designó a Begoña Gómez como directora- el 30 de octubre de 2020. En posteriores ediciones, el número de alumnos fue irregular: de los 17 en la edición no presencial de 2022-2023 a sólo nueve en la semipresencial del mismo año.
Uno de los hechos que investiga el juez es si existió trato de favor en la creación de esta cátedra y en el nombramiento de Begoña Gómez como codirectora. La universidad tuvo que recurrir a una excepción del reglamento para colocar a la mujer del líder socialista al frente de esta cátedra. Cabe destacar, además, que Gómez no es licenciada.
Un caso inédito entre el más de medio centenar de cátedras de la Complutense. El juez Peinado ha solicitado distinta documentación a la universidad para esclarecer los hechos relacionados con la cátedra. Entre ellos, «los alumnos matriculados y asistentes a cada una de las ediciones», además de los gastos y abonos a la dirección y los profesores, o los currículos de los directores de otras cátedras. Con independencia de lo que determine su señoría parece obvio, más allá de la estadística, que Begoña Gómez recibió un evidente trato de favor por ser la mujer del presidente del Gobierno. Los datos cantan.
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