¿Por qué Almeida quiere azoteas verdes en los tejados de Madrid?
La capital sólo tiene un 0,08% de sus cubiertas con zonas verdes
España es el segundo país de Europa con más cubiertas planas en viviendas, sin embargo, no se explota esta posiblidad


La ciudad de Madrid quiere impulsar los tejados verdes en lo alto de los edificios de la ciudad para mejorar la calidad de vida, es decir, Almeida ya tiene un Plan de Azoteas Verdes (PAV) para naturalizar las cubiertas con el ojo puesto en crear una capital más sostenible.
La urbe cuenta en la actualidad con 124.574 edificios en su territorio y sólo 100 (un 0,08%) cuenta con cubierta vegetal, una cifra que equivale a una superficie superior a 100.000 metros cuadrados, unos diez campos de fútbol, un porcentaje muy exiguo que no va acorde con las cifras que se manejan en otras ciudades y países europeos.
Sin embargo, hay un largo camino que recorrer, ya que España es el segundo país de Europa con más cubiertas planas en viviendas, el espacio ideal para convertir en un vergel estos espacios desaprovechados que tienen muchos beneficios, tanto ambientales como sociales.
Cubiertas planas desaprovechadas
El tener las cubiertas planas es un factor que hace más sencilla la implantación de coberturas vegetales, pero es necesario adaptar las normativas y agilizar los trámites para su implantación.
Por ejemplo, Alemania, Austria, Suiza o incluso Italia son países donde el apoyo de la administración pública y el alto conocimiento técnico permiten que el mercado crezca de manera destacada cada año.
Cubiertas extensivas e intensivas
En la actualidad existen dos tipos de cubiertas vegetales en las azoteas, las extensivas y las intensivas, que difieren principalmente en el tipo de vegetación que albergan, la profundidad del sustrato, el mantenimiento requerido y el peso de la cubierta.
Las cubiertas extensivas son más ligeras, requieren menos mantenimiento y se utilizan con plantas resistentes como sedums y suculentas. Las cubiertas intensivas, por otro lado, son más pesadas, requieren mayor mantenimiento y pueden albergar una mayor variedad de plantas, incluso árboles y arbustos, creando jardines accesibles.
Ventajas de las cubiertas vegetales
Este tipo de instalación facilita el control del drenaje de las aguas pluviales y mejora la eficiencia energética, la calidad ambiental del aire, el aislamiento acústico y aumenta la biodiversidad.
Hay que recalcar que las cubiertas ajardinadas no son las responsables de las filtraciones, las fugas de humedad se deben a una mala ejecución de la impermeabilización de la cubierta y a una deficiente protección de la misma.
El plan verde de José Luis Martínez-Almeida pretende cambiar el paisaje a vista de pájaro de la villa, tiene como objetivo el combatir el efecto isla de calor, reducir la contaminación y fomentar la sostenibilidad urbana.
Beneficios ambientales
Estas cubiertas vegetales ofrecen beneficios ambientales, como la mejora del confort térmico, la reducción del consumo energético y la contribución a una ciudad más resiliente. Además, las azoteas verdes mejoran la gestión de aguas pluviales, fomentan la biodiversidad y reducen el dióxido de carbono (CO₂).
En resumen, el PAV de Almeida busca transformar los tejados de la ciudad en espacios naturales que puedan ser disfrutados por los ciudadanos y que, a la vez, contribuyan a la sostenibilidad urbana.
Mayor eficiencia energética
Además, según un estudio de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería del Medio Natural de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV), se ha demostrado que las cubiertas vegetales mejoran la eficiencia energética, uno de los grandes objetivos para contribuir a la sostenibilidad de las ciudades.
La capa de sustrato y vegetación protege la superficie del edificio y esto hace que en el interior del mismo se consiga un mejor equilibrio de temperatura. Es decir, con una cubierta vegetal tanto en verano como en invierno se limita el acceso de la temperatura exterior al interior del edificio, manteniéndose, por tanto, el nivel de climatización y reduciendo el gasto energético.
Aprobación inicial
El delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, Borja Carabante, explicó en rueda de prensa que este Plan Especial de Azoteas Verdes (PAV), elaborado por el Área de Urbanismo, Medioambiente y Movilidad, que ha recibido la aprobación inicial en Junta de Gobierno.
El texto se someterá a información pública y se prevé su elevación a Pleno para que obtenga la luz verde definitiva en el primer cuatrimestre de 2025. La actuación que contempla el PAV conlleva grandes beneficios tanto a nivel particular como colectivo, pero para que las superficies de los edificios ya construidos muten en azoteas verdes se necesita la colaboración de los propietarios.
Para ello, el Ayuntamiento de Madrid establece incentivos urbanísticos que sirvan de estímulo para su creación. El principal, la construcción de áticos en la azotea mediante licencia directa y sin necesidad de estudio de detalle, salvo en el caso de vivienda unifamiliar y en aquellos edificios que se encuentren fuera de ordenación por exceso de altura.
Nuevos espacios de uso
Desde el ayuntamiento se informa que con esta actualización de las cubiertas con el PAV, «los inquilinos o usuarios de un edificio donde se implanten las cubiertas verdes obtienen nuevos espacios de uso y convivencia, mejorando su funcionalidad. Además, se permite ganar elementos comunes que, dadas las condiciones actuales, no tengan dónde ubicarse, como pueden ser locales de instalaciones, trasteros y zonas comunes».
Explican que «la actual redacción de las normas urbanísticas permite la construcción de áticos mediante licencia directa en aquellos ámbitos que los autorice y, en los que no, a través de un estudio de detalle. Con el Plan de Azoteas Verdes se suprime dicho procedimiento, agilizando y facilitando la tramitación si se instala una cubierta vegetal».
Además, apuntan que los áticos se podrán destinar a los usos permitidos por la norma zonal u ordenanza particular del planeamiento, siempre sin superar la edificabilidad máxima establecida para la parcela.
En este sentido, si se implantan cubiertas vegetales, el ayuntamiento permite que se construyan diferentes espacios sin que compute la edificabilidad del siguiente modo:
- En edificios dotacionales de servicios colectivos también se permite construir cuartos para bicicletas y se admite la disposición en ático de almacenes, archivos, aseos, vestuarios, cuartos de lavandería, oficios de limpieza, otras dependencias auxiliares sin permanencia de personas.
- En edificios de otros usos, excepto vivienda unifamiliar, se pueden construir cuartos para bicicletas.
Una cuestión de prioridades
Cuando no se construya un ático en la azotea y la cubierta se destine íntegramente a cubierta vegetal, se permite construir los espacios anteriormente mencionados en otras disposiciones del edificio que estén abiertas o sin uso en plantas baja, inferior a la baja o bajo cubierta.
El Ayuntamiento establece un orden de prioridad para la implantación de infraestructuras verdes. La primera de ellas es la instalación de sombras vegetal y ajardinamiento en rasante. En caso de no ser posible o resultar insuficiente, se podría optar por cubiertas o fachadas verdes.
En resumen, los beneficios de los tejados verdes son:
- Mitigación del efecto isla de calor: Las azoteas verdes ayudan a reducir la temperatura en las ciudades, al absorber y reflejar la luz solar, lo que crea un ambiente más fresco.
- Reducción de la contaminación: Las plantas de los tejados verdes absorben el dióxido de carbono y otros contaminantes atmosféricos, lo que contribuye a mejorar la calidad del aire.
- Mejora de la gestión de aguas pluviales: Las cubiertas vegetales funcionan como esponjas naturales, absorbiendo el agua de lluvia y reduciendo la cantidad de agua que llega a la red de alcantarillado, lo que ayuda a prevenir inundaciones.
- Aumento de la biodiversidad: Las azoteas verdes pueden ser utilizadas como hábitats para la fauna local, fomentando la biodiversidad en la ciudad.
- Mejora del confort térmico y acústico: Las azoteas verdes pueden ayudar a aislar térmicamente y acústicamente los edificios, lo que mejora el confort interior.
- Creación de espacios de convivencia: Las azoteas verdes pueden ser transformadas en espacios de encuentro y recreación para los ciudadanos, fomentando la convivencia y la sostenibilidad.
- Absorción acústica: Al aumentar la masa de la cubierta, gracias al espesor de la capa de sustrato, especialmente, se incrementa la absorción acústica, actuando además la vegetación como atenuador del ruido ambiental.