Menos aves en invierno y casi las mismas en verano alertan del grave deterioro global que vive España
Las especies nocturnas, esteparias y ligadas a humedales muestran los mayores descensos poblacionales
a productividad de las aves baja por eventos extremos y la menor proporción de ejemplares jóvenes

La situación de las aves en España atraviesa un momento crítico marcado por el deterioro progresivo de sus poblaciones. El Estado de las Aves de España 2024, elaborado por SEO/BirdLife, revela una tendencia preocupante que afecta especialmente a determinados grupos de especies. El panorama refleja cómo el cambio climático y la alteración de los ecosistemas golpean con fuerza a estas poblaciones.
Los datos científicos recopilados por SEO/BirdLife durante años muestran que las aves nocturnas, las especies agrícolas, las esteparias y aquellas vinculadas a humedales experimentan los retrocesos más acusados.
Estas comunidades aviares enfrentan amenazas múltiples que comprometen su supervivencia a largo plazo. La información procede de programas de seguimiento como Sacre, Noctua, Migra y Paser, que monitorizan constantemente la evolución de la avifauna.
Crisis de hábitats
La pérdida de hábitats naturales por eventos climáticos extremos constituye uno de los factores más devastadores. Los incendios forestales del verano de 2025, junto con sequías prolongadas y olas de calor cada vez más intensas, han reducido drásticamente las zonas de cría y alimentación. Este fenómeno se suma a la transformación de espacios agrícolas tradicionales en cultivos intensivos que eliminan la biodiversidad.
El análisis de SEO/BirdLife revela una merma generalizada en la productividad de las aves, evidenciada por la menor proporción de ejemplares jóvenes en relación con los adultos.
Esta caída en las tasas de reproducción señala dificultades crecientes para completar con éxito los ciclos reproductivos. Los polluelos sufren especialmente las consecuencias de los fenómenos meteorológicos extremos que se concentran a finales de primavera y principios de verano.

Especies en declive
Las aves esteparias representan uno de los grupos más castigados por la crisis ambiental actual. Especies emblemáticas como avutardas, sisones, gangas y alondras ricotí ven cómo sus poblaciones retroceden año tras año.
La transformación de las llanuras cerealistas en regadíos intensivos, junto con la instalación de infraestructuras energéticas sin planificación adecuada, fragmenta sus territorios vitales.
Los humedales españoles, con el 85% de los espacios de relevancia internacional en estado de conservación preocupante, tampoco escapan a esta dinámica negativa.
Lugares emblemáticos como Doñana, las Tablas de Daimiel o el Mar Menor concentran poblaciones críticas de especies palustres. La reducción del hidroperiodo de las marismas naturales afecta directamente a la supervivencia de aves como el avetoro común o la cerceta pardilla.

Datos científicos
El documento presentado por SEO/BirdLife se basa en información procedente de más de 37 millones de registros recopilados en plataformas como eBird, que conecta ciencia ciudadana con gestión ambiental.
Miles de voluntarios y técnicos recorren anualmente el territorio español para censar las poblaciones de aves comunes y amenazadas. Esta labor de seguimiento resulta fundamental para detectar cambios en las tendencias poblacionales.
La última revisión del Libro Rojo de las Aves de España incorpora datos actualizados sobre el estado de conservación de las especies más amenazadas. El catálogo identifica las poblaciones en peligro crítico y aquellas vulnerables que requieren medidas urgentes. Los expertos coinciden en señalar que la ventana de oportunidad para revertir estos declives se estrecha progresivamente.

Llamamiento urgente
Miles de voluntarios, técnicos y científicos han participado en la elaboración de este diagnóstico sobre la avifauna española. El trabajo realizado por SEO/BirdLife subraya la necesidad imperiosa de reforzar las políticas de conservación de hábitats. Sin actuaciones decididas, muchas especies podrían desaparecer de amplias zonas del territorio en las próximas décadas.
Las aves funcionan como termómetros naturales que revelan el estado de salud de los ecosistemas. Su sensibilidad a los cambios ambientales las convierte en aliadas indispensables para comprender cómo evoluciona el entorno. Cuando las poblaciones aviares retroceden, están señalando problemas más profundos que afectan al conjunto de la biodiversidad.

Margen de esperanza
Pese al escenario de declive observado en numerosas tendencias, SEO/BirdLife subraya que aún existe margen para revertir la situación. La aplicación de políticas de conservación efectivas, el apoyo decidido a la ciencia ciudadana y una gestión verdaderamente sostenible del territorio pueden marcar la diferencia.
Experiencias exitosas en la recuperación de especies como el quebrantahuesos o el águila imperial demuestran que la inversión en conservación obtiene resultados.
Presencia estratégica
El Inventario de Áreas Importantes para la Conservación de las Aves y la Biodiversidad identifica los espacios prioritarios que requieren protección especial.
Estos enclaves albergan poblaciones clave cuya preservación resulta estratégica para garantizar la supervivencia de las especies. La consolidación de la Red Natura 2000 y la mejora de su gestión se presentan como herramientas fundamentales.
La conexión entre ciencia, ciudadanía y gestión ambiental emerge como el camino necesario para afrontar los retos que enfrenta la avifauna española. Sólo mediante el compromiso compartido será posible garantizar que las futuras generaciones puedan seguir disfrutando de la riqueza ornitológica que caracteriza a España. El momento de actuar es ahora, antes de que algunas especies traspasen el punto de no retorno.