Centrales de carbón

Endesa redefine su plan estratégico con la energía puesta en la descarbonización

La energética eleva su inversión a 8.900 millones hasta 2026 para crecer en electrificación limpia

Bogas, Endesa
José Bogas, consejero delegado de Endesa.
Antonio Quilis Sanz
  • Antonio Quilis Sanz
  • Periodista especializado en información medioambiental desde hace más de 20 años y ahora responsable de OKGREEN en OKDIARIO. Antiguo director de El Mundo Ecológico y colaborador en temas de medioambiente, ecología y sostenibilidad en Cadena Ser.

El plan estratégico para el periodo 2024-2026 de Endesa sigue apostando por las energías limpias y la descarbonización. Con la vista puesta en la eólica y la hidroeléctrica, refuerza su estrategia en las renovables para continuar en el camino de las energías limpias y el abandono de las térmicas y el carbón.

La compañía afirma que va a seguir la «senda de la descarbonización del mix de generación de la compañía al tiempo que focaliza su oferta a los clientes domésticos y empresariales en los servicios de valor añadido y en el suministro de electricidad a partir de fuentes no emisoras».

La eléctrica ha presentado su remodelado programa para los dos próximos años exponiendo a su comunidad financiera que se va a aplicar en un «contexto de mayores costes financieros y de inflación que pueden afectar al ritmo de electrificación de la economía».

Crecer en la electrificación

La «reevaluación» de objetivos de Endesa implica elevar la inversión a 8.000 millones de euros hasta 2026 para crecer en una «electrificación limpia» identificando la sostenibilidad como parte de uno de los tres ejes estratégicos. Además el ajuste de rumbo afecta a la rentabilidad, la eficiencia de operaciones, el control de costes y el equilibrio financiero.

Endesa afirma que toda esta estrategia «es plenamente compatible con la senda de la descarbonización del mix de generación de la compañía al tiempo que focaliza su oferta a los clientes domésticos y empresariales en los servicios de valor añadido y en el suministro de electricidad a partir de fuentes no emisoras».

La inversión en renovables se mantiene estable en 4.300 millones, para alcanzar los 13.900MW de potencia renovable a final del plan y llegar así al 93% de la producción libre de emisiones en la Península.

También se ha definido por una mayor apuesta por la eólica, que absorberá 1.600MW (por 2.000MW de la solar), «al tiempo que los proyectos de repotenciación eólica e hidroeléctrica son las principales novedades respecto al plan anterior».

Una inversión de 8.900 millones

En total, la inversión contemplada en la nueva estrategia para la Península Ibérica se mantiene en una línea continuista respecto al plan 2023-2025, situándose en los ya mencionados 8.900 millones.

La partida destinada a Redes en este plan (2.000 millones netos) está condicionada a una mayor visibilidad sobre el periodo regulatorio 2026-2031 en cuanto a la remuneración de la inversión en redes.

Tras considerar todos estos elementos, Endesa fija como objetivos para 2026 alcanzar un beneficio bruto (ebitda) de entre 5.600 y 5.900 millones, un beneficio ordinario neto de 2.200-2.300 millones, una deuda financiera neta de 8.000-9.000 millones y un dividendo de 1,5 euros (lo que supondría una rentabilidad por dividendo del 8%), con un suelo garantizado de 1 euro/acción durante los tres ejercicios del plan.

Eólica y transición justa

Los tres proyectos estrella en este campo son los que la energética denomina como «de transición justa», aquellos en los que hay un compromiso con el entorno de las centrales térmicas que se encuentran en fase de cierre de actividad en Andorra (Teruel), Pego (Portugal) y Galicia.

Los dos primeros suponen una inversión de 1.700 y 700 millones de euros, respectivamente, y estarán en funcionamiento en 2026-2027 y 2026. El tercero es el conjunto de parques eólicos que suman 800MW y una inversión del entorno de 1.000 millones para estar en marcha en 2025.

Endesa asegura que son proyectos de transición energética sostenibles financieramente, en los que buscan «oportunidades laborales a los empleados afectados por actividades que cesan apoyándoles con formación, desarrollando económicamente la zona con nuevas actividades económicas sostenibles de futuro».

Además reseña su firme decisión de salida total del carbón en España para 2027, con el fin de operación de Alcudia que se mantiene por razones de seguridad de suministro, y tras lograr el cierre de su mayor central de carbón (As Pontes) este año.

Estrategia comercial

Endesa, además de la descarbonización de su actividad, se marca como objetivo clave de fomento de la electrificación limpia que entorno al 90% de su energía vendida a clientes a precio fijo proceda de fuentes no emisoras en 2026, desde el 76% del año en curso. El margen unitario integrado del negocio eléctrico liberalizado se mantendrá estable en el periodo.

En el negocio de gas, se prevé una recuperación de los márgenes tras el excepcional 2023 muy afectado por la volatilidad del mercado, al tiempo que la cartera de clientes se mantendrá plana en 1,8 millones, de los que 1,4 en el mercado libre. Se prevé un fuerte descenso en el uso de gas para producir electricidad en centrales de ciclo combinado.