Las energías renovables podrían haber evitado que el 2023 fuera el año más cálido de la historia

La Organización Meteorológica Mundial (OMM) ha confirmado oficialmente que el 2023 es el año más cálido jamás registrado en la historia desde que se tienen registros «por un margen enorme» y ha advertido que este 2024 podría aún ser todavía más caluroso.

El organismo autorizado por las Naciones Unidas para analizar el tiempo, el clima y el agua ha mostrado su preocupación por la temperatura global del planeta con unos datos «jamás registrados» y que ha arrojado un promedio anual que se ha acercado a los 1,5° Celsius por encima de los niveles preindustriales.

La secretaria general de la OMM, Celeste Saulo, ha declarado a raíz de estos preocupantes datos que «no podemos darnos el lujo de esperar más. Ya estamos tomando medidas, pero tenemos que hacer más y tenemos que hacerlo rápidamente».

Acelerar las energías renovables

Así mismo ha solicitado, ante el año 2023 más cálido de la historia, que «tenemos que hacer reducciones drásticas en las emisiones de gases de efecto invernadero y acelerar la transición a fuentes de energía renovables». Una solución que podría haberse evitado si las energías renovables estuvieran a pleno rendimiento remplazando las fósiles evitando que el pasado año alcanzáramos este triste récord.

«El cambio climático es el mayor desafío al que se enfrenta la humanidad. Nos está afectando a todos, especialmente a los más vulnerables», ha afirmado Saulo.

La OMM ha expresado que el promedio de temperatura anual es «algo simbólico porque el Acuerdo de París sobre el cambio climático tiene como objetivo limitar el aumento de temperatura a largo plazo (promediado durante décadas en lugar de un año individual como 2023) a no más de 1,5° Celsius por encima de los niveles preindustriales».

La organización ha recopilado seis importantes conjuntos de datos internacionales utilizados para monitorear las temperaturas globales y, consolidados por la OMM, «muestran que la temperatura global promedio anual fue 1,45 ± 0,12 °C por encima de los niveles preindustriales (1850-1900) en 2023».

Los meses más calurosos de 2023

Entre los registros del año más cálido jamas visto en el planeta destacan las temperaturas globales entre el periodo de junio y diciembre establecieron nuevos registros mensuales y se informa que julio y agosto de 2023 fueron los dos meses más calurosos registrados.

El paso del enfriamiento de La Niña al calentamiento de El Niño para mediados de 2023 se refleja claramente en el aumento de la temperatura con respecto al año pasado. «Dado que El Niño suele tener el mayor impacto en las temperaturas globales después de alcanzar su punto máximo, 2024 podría ser aún más caluroso», ha apuntado la secretaria general.

El origen antropogénico, ocasionado por la actividad humana, es inequívoco según la OMM y respalda esta afirmación explicando que «si bien los fenómenos de El Niño ocurren naturalmente y van y vienen de un año a otro, el cambio climático a largo plazo está aumentando y esto se debe inequívocamente a las actividades humanas».

Crisis climática y desigualdad

En cuanto a que la crisis climática es la responsable de empeorar la crisis de desigualdad se reseña que esta circunstancia afecta a «todos los aspectos del desarrollo sostenible y socava los esfuerzos para abordar la pobreza, el hambre, la mala salud, los desplazamientos y la degradación ambiental» según Saulo, quien recientemente ha asumido el cargo de secretaria general de la OMM el 1 de enero de 2024 .

Desde la década de 1980, cada una de ellas ha sido más cálida que la anterior siendo los últimos nueve años como los más cálidos jamás registrados. Los años 2016  y 2020 fueron clasificados anteriormente como los más cálidos registrados, con 1,29 ±0,12°C y 1,27 ±0,12°C por encima de la era preindustrial.

Según los seis conjuntos de datos, el promedio de diez años 2014-2023 fue 1,20 ±0,12 °C por encima del promedio de 1850-1900, teniendo en cuenta un margen de incertidumbre.

Guterres pide medidas innovadoras

El Secretario General de la ONU, António Guterres, ha afirmado que «las acciones de la humanidad están quemando la tierra. 2023 fue un mero anticipo del futuro catastrófico que nos espera si no actuamos ahora. Debemos responder a los aumentos récord de temperatura con medidas innovadoras».

«Aún podemos evitar lo peor de la catástrofe climática. Pero sólo si actuamos ahora con la ambición necesaria para limitar el aumento de la temperatura global a 1,5 grados Celsius y lograr justicia climática», ha declarado Guterres en un comunicado.

El seguimiento a largo plazo de las temperaturas globales es sólo un indicador del clima y de cómo está cambiando. Otros indicadores clave incluyen las concentraciones atmosféricas de gases de efecto invernadero, el calor y la acidificación de los océanos, el nivel del mar, la extensión del hielo marino y el equilibrio de masa de los glaciares.

2023, un año de récords climáticos

El informe provisional de la OMM sobre el estado del clima mundial en 2023, publicado el 30 de noviembre, mostró que se batieron récords en todos estos ámbitos.

Las temperaturas de la superficie del mar fueron excepcionalmente altas durante gran parte del año, acompañadas de olas de calor marinas graves y dañinas. La extensión del hielo marino antártico fue la más baja registrada, tanto para el mínimo de finales de verano en febrero como para el máximo de finales de invierno en septiembre.

Estos cambios a largo plazo en nuestro clima se manifiestan en nuestro clima en el día a día. En 2023, el calor extremo afectó la salud y contribuyó a provocar incendios forestales devastadores, intensas lluvias, inundaciones y ciclones tropicales que se intensificaban rápidamente dejaron un rastro de destrucción, muerte y enormes pérdidas económicas.

La OMM publicará su informe final sobre el estado del clima mundial 2023 en marzo de 2024. Éste incluirá detalles sobre los impactos socioeconómicos en la seguridad alimentaria, los desplazamientos y la salud.

Cambio climático y renovables

Según la OMM la capacidad total instalada de energías renovables a nivel mundial, y su nivel de contribución a la red eléctrica, no han dejado de aumentar en los dos últimos decenios. Según el informe El año 2022 a examen: demanda de energía y potencial de los recursos energéticos renovables a escala mundial condicionados por el clima, presentado en la COP28, en la actualidad alrededor del 30 % de la electricidad generada en el mundo es de origen renovable, gracias al rápido despliegue de este tipo de fuentes de energía en los últimos diez años.

En la publicación se destaca el papel clave de la información y los servicios meteorológicos y climáticos para encarar los retos que conlleva la transición hacia las energías renovables y aprovechar el potencial sin explotar de esas fuentes de energía.