Al volante del 2 CV o el Traction Avant: los Citroën que marcaron un antes y un después en el automóvil
Citroën lleva más de 100 años fabricando vehículos. La firma gala nació en el año 1919 de la mano de André Citroën y sus modelos han marcado un antes y un después en la historia del automóvil a nivel mundial, pero también de la vida de las personas. ¿Quién no tiene una historia que contar al volante de un coche con el doble chevrón? A lo largo de los años la marca ha conseguido romper paradigmas y ha abierto nuevos caminos para entender las nuevas formas de movilidad, historia que guarda en Aulnay-Sous-Bois, a las afueras de París, en un espacio en el que se pueden encontrar todos los vehículos de Citroën que dejaron huella.
Acostumbrados a montarnos en coches que incluyen las últimas tecnologías o que están propulsados por motores electrificados, OKDIARIO se sube a los modelos más emblemáticos del fabricante francés: desde el Tracción Delantera, hasta el Méhari, pasando por el 2CV o el GS. Una experiencia única, al alcance de pocos, y no apta para todos los conductores, ya que no tiene nada que ver conducir un Citroën de ahora, sencillo e intuitivo en el que las marchas se cambian solas, con el de hace 90 años, donde es más complicado de lo que parece primera.
Al volante de los clásicos
En un pequeño circuito cerca de las instalaciones en las que se encuentran las joyas más preciadas de Citroën, este diario se ha metido en la máquina del tiempo y ha podido comprobar cómo era conducir un coche hace más de 90 años. Citroën C4 G (1932), Traction Avant (1956), Citroën 2 CV Spot (1976), Citroën Mehári (1979) y Citroën CX GTI Turbo (1989) son los cinco modelos que hemos probado y, una vez dentro, sorprende que después de tanto tiempo sigan funcionando como el primer día que salieron de la fábrica.
No me he podido resistir y he empezado por el Mehári. Una joya de la década de los 70 en verde caqui de 28 CV. Eso si, nada fácil de conducir, ya que la palanca de cambios está colocada de forma horizontal y para arrancar el vehículo -meter primera- hay que hacer el movimiento que ahora se hace para iniciar la segunda marcha. Ya en circulación por el circuito se experimenta una gran sensación de libertad por su diseño.
Nos bajamos del Citroën Mehári para montarnos en el 2 CV Spot, que cuenta con la misma palanca de cambios. Un modelo icónico de la firma gala, que se trata de una edición limitada, también de la década de los 70, de la que sólo se ensamblaron 1.800 unidades. Divertido, muy divertido, pero con escasa capacidad de giro. Una de las características comunes de todos los vehículos en los que nos hemos montado, y que llama la atención, es que los asientos no se pueden mover y, también, la ausencia de cinturones -elemento del que me he dado que no estaba al buscarlo de forma automática al entrar en el primero de los vehículos-.
Si tuviera que elegir entre todos los modelos en los que nos hemos montado, sin lugar a duda, me llevaría a Madrid el Citroën C4 Traction Avant. Un coche de la década de los 50 con el que la marca destacó por ser una de las pioneras en introducir la tracción delantera y que llama la atención por su elegante diseño exterior.
Conservatorio Citroën
El Conservatorio Citroën es un auténtico museo de la historia del doble chevrón: alberga más de 400 piezas, lo que lo convierte en la mayor colección internacional de Citroën en todo el mundo, de las cuales están expuestas 250 unidades, incluyendo también los concept cars, que reflejan los cambios en el diseño del fabricante francés. También posee vehículos insólitos, ya sea por su historia o por sus detalles específicos, como el Tipo J, con el que Citroën ha dejado su huella en las ruedas de los tractores, o un helicóptero biplaza, desarrollado por la marca en los años 70 como alternativa a los atascos.
Entre las joyas que se pueden contemplar están los modelos del periodo de entreguerras, testigos del nacimiento de la marca de la mano de André Citroën como el Tipo A, primer modelo fabricado en serie en Europa; el B10, pionero en el uso de chasis de acero; el C4; el C6; el Rosalie, vencedor de varios récords mundiales de resistencia; o el Citroën Traction Avant, el automóvil que popularizó la tracción delantera.
Un viaje en el tiempo que también pasa por los años 40, 50, 60, 70 y 80 que siguen muy presentes por su diseño inconfundible o sus innovaciones técnicas, como el Citroën 2 CV; el futurista Citroën DS; el innovador Citroën GS y las versiones más deportivas del Citroën SM.
Citroën no olvida en este periplo por su historia los vehículos comerciales: uno de los pilares de la marca en la actualidad y a lo largo de las últimas décadas. Entre las piezas destaca el último ejemplar fabricado del Tipo H, el célebre furgón que es un icono del fenómeno de los ‘Food Truck’. Ni tampoco la aventura y el deporte que constituyen un elemento esencial de la identidad de la marca gala con modelos como el 2 CV Cross, el ZX o el C4 Autocadenas.