Ferrari Only: la subasta de tus sueños
Quizás el sábado 26 de septiembre te pueda cambiar la vida. Al menos en lo que a tu vida motorizada se refiere. Todos aquellos que disfrutamos con los coches, soñamos casi a diario con tener un Ferrari en nuestro garaje. Y el que diga lo contrario miente. Pues bien, quizás estemos ante la mejor oportunidad de nuestras vidas para cumplir este sueño.
Este día se celebrará ‘Ferrari Only’, una subasta en la que se pondrán a la venta por este sistema de pujas hasta 27 de los modelos más míticos de la firma del ‘Cavallino Rampante’. Los habrá de todo tipo. Desde inaccesibles para el bolsillo hasta otros por que aquellos que tengan un poco de dinero ahorrado podrán pujar.
El único denominador común que veremos en los vehículos que el día 26 se subasten será el anagrama de su frontal. Todos serán Ferraris. A partir de ahí, nos encontraremos desde los modelos más nuevos hasta algunos clásicos, pasado por ediciones limitadas de esas que los más adinerados gustan de comprar. Por ejemplo, sabemos que encontraremos algunas unidades de dos de las mayores joyas que han salido de Maranello, el Ferrari F40 y su sucesor, el F50. Máximos exponentes de la casa italiana en los años 80 y 90.
Si echamos la vista un poco hacia delante, vemos que también podremos pujar por algunos de los modelos más recientes, deportivos y efectivos. Hablamos del Ferrari FXX o el Ferrari 430 Scuderia. No obstante se espera que los mayores éxitos de la subasta sean modelos más antiguos. Los clásicos son objeto de deseo de los ricos de medio mundo, con lo que la suma que se espera recaudar por el Ferrari 275 GTB/2 de 1965, el Sbarro P4 o el Ferrari 512 BB de 1977 puede ser de récord.
Eso sí, según fuentes de la organización de la propia subasta, no se descarta que haya algunas opciones realmente asequibles, si es que se le puede aplicar este calificativo a un Ferrari. La previsión es que hay algunos coches que por algo más de 40.000 euros encuentren dueño.
La joya de la corona de la subasta ‘Ferrari Only’ será algo más cara. Ésta no es otra que el Ferrari F310B que pilotó Michael Schumacher en la temporada 1997 del mundial de Fórmula 1. Fue el segundo monoplaza italiano que condujo el piloto de Kerpen, el primero con el que pudo pelear por el mundial. Aunque como recordaréis todos, finalmente acabó perdiendo el título en la última carrera de la temporada cuando trató de sacar de la pista a Jacques Villeneuve, su rival por el campeonato, cuando el canadiense trató de adelantarle. Un coche con mucha historia que algún personaje con mucho dinero podrá disfrutar en su garaje durante años. ¡Qué envidia!
