Cómo empujar el coche para arrancarlo si nos quedamos sin batería
Quedarse sin batería en el coche, o que ésta se rompa, puede ser algo que nos ocurra a cualquiera de nosotros. La muestra más clara de ello es que, al intentar arrancar, no se produzca ningún sonido por parte del motor. En ese caso, podemos trata de poner en marcha el vehículo por el clásico método del empujón. Pero, ¿tenemos claro cómo hacerlo? No basta simplemente con ponerse detrás del coche y dar rienda suelta a nuestra fuerza. Lo que hay que tener en cuenta es lo siguiente:
Siempre alguien dentro del coche
Sea cual sea la circunstancia, empujar un coche para arrancarlo requiere como mínimo la presencia de dos personas, ya que una de ellas debe estar sentada en el asiento del conductor. Lo decimos porque sí, es posible arrancar el coche uno solo si la pendiente es favorable, pero desde luego no es para nada seguro. Puede ser peor el remedio que la enfermedad.
Apaga todo lo que puedas
Antes de comenzar a empujar el coche debes apagar todo lo que esté en tu mano y que pueda demandar energía por parte de la batería. Nos referimos al sistema de radio, al limpiaparabrisas, a las ópticas o el aire acondicionado, en el caso de que éste sea manual.
Una vez preparados
Cuando ya estemos preparados para que nos empujen, debemos realizar una serie de acciones de forma simultánea. Cuando giremos la llave a la posición de encendido, debemos tener la primera o la segunda velocidad engranada y el embrague pisado. Obviamente, no debemos pisar el freno ni tener el freno de mano puesto.
Una vez que nos empiecen a empujar, debemos coger la máxima velocidad que sea posible, de tal manera que todo será más efectivo si nos favorece la pendiente. En ese momento, tienes que soltar el pie del embrague a la vez que pisas el acelerador. De esta manera el motor debería arrancar.
Una solución de emergencia
Recuerda que esto es simplemente una solución de emergencia para poder llegar al taller más cercano. Arrancando el coche, la batería cogerá suficiente carga como para desplazarte, pero ya está. Debes incluso evitar las paradas en la medida de lo posible. Y, por supuesto, en el caso de que no logres arrancarlo en un par de intentos, llamar a la grúa o cambiar tú mismo la batería será algo obligado.