Cambio drástico en los semáforos: llega un color nuevo que revolucionará todo

Existen algunos elementos cuando hablamos del tráfico o de la circulación que ya son fundamentales y que nos parece mentira el solo pensar cómo serían de no estar entre nosotros.

Hablamos de los semáforos, esenciales en la vida diaria para poder regular la circulación y que se mantenga un óptimo flujo de tráfico, incluso más en las ciudades donde por la elevada concentración poblacional y, por lo tanto, de vehículos y peatones, se evita el caos y se reducen de forma drástica los accidentes.

Conociendo más sobre los semáforos

Desde su invención en el siglo XIX, han ido cambiando en diseño y como no, en tecnología.  Esto lo reflejan los semáforos barceloneses que tienen las siluetas de Mortadelo y Filemón para poder hacer un homenaje al creador ya fallecido, Francisco Ibañez, pero donde la función básica ha quedado inmutable.

Habitualmente, en los semáforos se usan tres colores, el rojo, el amarillo u el verde.  Con el rojo, los conductores se deben detener, el amarillo nos indica que tengamos precaución y en el caso del verde, nos indica que los conductores pueden avanzar.

El caso es que el coche autónomo está llegando poco a poco y, de cara al futuro, en las ciudades se ha abierto un importante debate sobre la necesidad de que las señales de tráfico añadan cuatro colores en vez de con los que cuenta actualmente. En este caso, en particular, sería el blanco.

Todo ello nace de un estudio en USA que dijo que es el mejor color para controlar el tráfico cuando los coches autónomos sean mayoría en los coches autónomos.

¿Cuál es el significado de la luz blanca?

Los ingenieros han propuesto en este estudio la llamada «fase blanca», que es una etapa en la que la capacidad de procesado de los coches autónomos puede ayudar a que mejore la regulación del tráfico que se produce en los cruces.

Hablamos de un planteamiento que va a mejorar de forma importante el tiempo por el que se pasa en las intersecciones y que va a reducir el consumo de combustible.

La luces rojas van a seguir significando «stop» y las luces verdes significarán «avanzar». Las luces blancas lo que harán será indicar a los conductores de los coches no automatizados que sigan al coche que tienen delante.

¿Cuándo haya un número suficiente de coches autónomos que se aproximen a la intersección se va a activar la luz blanca y los conductores de coches no automatizados, donde deben seguir los movimientos de los coches precedentes.

En el caso de que el coche de delante se detenga, ellos se van a detener; si el coche atraviesa la intersección, ellos van a ir detrás.

Pensemos que solo podemos ver semáforos con luz blanca que es posible verse en algunas ciudades de España, que son los que nos comenta el Código de Circulación:

Si el semáforo consistirá en una franja blanca iluminada sobre un fondo circular negro, las indicaciones se referirán solo a los tranvías, así como a los buses de líneas regulares, salvo que haya un carril reservado para buses, taxis y demás vehículos, donde solo se van a referir a los que circulen por él.

Conoce más sobre los semáforos y su historia en España

En nuestro país, el primer semáforo que se colocó en el cruce con la calle Alcalá con Gran Vía, más concretamente el 17 de marzo de 1926.

La empresa SICE fue la encargada de instalar la primera farola con señales luminosas para la regulación de la circulación de vehículos y peatones, como se llamaban al principio.

En aquellos tiempos, era el sitio en el que estaban las casas principales de coches, como Renault, Fiat y Citröen.

Se tuvo que ir educando a los ciudadanos para saber cuando tenían que parar, de tal forma que se pudieran enseñar las normas cívicas de circulación en la actualidad.

Por este motivo, se emitieron anuncios en los periódicos y medios de comunicación de cara a poder concienciar en el Reglamento de Tráfico.

A pesar de esto, los semáforos solo se dirigían a los vehículos y no a los peatones. Esto cambiaría en la década de los 50 del siglo pasado, cuando entraron las míticas figuras humanas que destacaban sobre los colores para regular a coches y peatones conjuntamente.

Actualmente, se regula el tráfico gracias a algoritmos desde un centro de control mediante un software especializado.

En el año 2011 se introdujo la tecnología LED a fin de reducir el consumo de electricidad, que no solo sirvieron para el ahorro energético, también para dar una magnífica visibilidad a pie de acera.

Conclusiones

Después de todo lo que te hemos comentado, ahora ya sabes la llegada del nuevo color y los cambios que ello supondrá.  Si te pareció interesante, no dudes en compartirlo con otros usuarios para los que pueda ser de utilidad.