BMW 633 CSI, el ‘malo’ de Regreso al Futuro
La película de ‘Regreso al Futuro II’ está durante estos días más de actualidad que nunca. Más incluso que en el momento de su estreno. El motivo no es otro que la llegada de la fecha en el mundo real, 21 de octubre de 2015, prevista para la llegada de Marty McFly al futuro -la película está ambientada en 1985-. Como muchos recordaréis, el personaje encarnado por Michael J. Fox viajaba a través del tiempo en un DeLorean DMC-12 del que hace unos días te contamos todos sus secretos. Sin embargo, no es el único coche que tuvo su couta de protagonismo en la pantalla cuando la segunda parte de esta famosa saga vio la luz. Otro de ellos es el BMW 633 CSI, que era el coche que conducía Biff Tannen, el malo de la película.
Salta a la vista que el BMW 633 CSI que vimos en la película poco o nada tiene que ver con el original. Además de sus capacidades aéreas, se le dotó de una imagen que por aquel entonces era muy futurista, si bien hoy en día parece el resultado de un encargo a un taller de ‘tuning’ barato.
El modelo original data del año 1976, y hoy en día vuelve a ser noticia además de por tan señalada fecha, porque su actual propietario ha decidido sacarlo a subasta. Éste responde al nombre de Jeff Chabotte, que lo compró en su momento en unas condiciones que no eran precisamente las idóneas. No obstante, hace ahora 11 años decidió restaurar su carrocería, manteniendo eso sí algunos elementos que lo convierten en un coche especial, como uno de los pilotos que fue roto por el mencionado Tannen en una de las escenas de la película. También se pueden apreciar algunas partes oxidadas y un interior al que no se le ha hecho absolutamente nada. Digamos por tanto que se ha realizado una restauración de cara a la galería.
Quien sabe si en su momento esto estaba planeado, pero lo cierto es que el señor Chabotte aprovecha la fiebre que se ha desatado por la saga cinematográfica de los ochenta para vender el coche. El precio de partida es de 10.000 dólares, aunque estamos seguros de que esta cifra subirá como la espuma gracias a algún coleccionista adinerado y aficionado al cine. Se sabe también que el coche conserva el motor original de seis cilindros y 197 CV, que al parecer funciona sin problemas a pesar de tener 119.000 kilómetros a sus espaldas.
