Marisa Jara se abre para hablar del cáncer que sufre y sus deseos de ser madre
Los últimos meses no han sido nada fáciles para Marisa Jara. En apenas unas semanas, la modelo pasó de la emoción de plantearse su vida como madre a descubrir, en octubre, que tenía un tumor en el estómago por el que tenía que pasar de manera urgente por el quirófano. Parecía que con esa operación todo estaba solucionado, poco después anunciaba que tenía que volver a operarse.
A finales de febrero, Marisa volvió a ser intervenida para extirparle un mioma en el útero y, tras dejar un tiempo prudencial, ha roto su silencio de la mano de ‘¡Hola!’, donde cuenta que se ha mudado de Madrid a Sevilla para estar cerca de su familia, su mejor apoyo.
Si bien desvela que todavía sufre dolores por las dos operaciones, prefiere no pensar en la enfermedad más que cuando tiene que ir a revisiones y centrarse en “mantener una buena actitud y que no entren en mi mente pensamientos negativos. Cuando la vida te golpea así, no tienes otra manera de afrontarlo”. El suyo es un tumor complicado pues, según cuenta se puede volver a reproducir y no tiene un tratamiento específico. Si se reproduce tendrá que volver a operarse.
A pesar de todo, a Marisa Jara no se le ha olvidado su plan más bonito: convertirse en madre. De hecho, fue su sueño por ser mamá lo que la llevó al ginecólogo y esto, a su vez, a descubrir sus problemas de salud. Pero por muchas ganas que tenga, sabe que lo más importante es estar sana, “ojalá la vida me regale un hijo. Sería la mujer más feliz del mundo. Pero lo primero soy yo y mi salud”, cuenta. Crear a la familia con un hombre a su lado es algo secundario. Sí, sigue abierta al amor, especialmente a aquellos que tengan mucho sentido del humor, pero tampoco es algo que le quite el sueño. Si Cupido acierta con su flecha, bien y, si no, pues también.