Déjà vu: Meghan se viste de Roland Mouret y reinventa su último look de soltera
Continúa el desfile de firmas en el armario de Meghan Markle. Si ayer la Duquesa sorprendía estrenando un diseño de Emilia Wickstead, la misma modista que acusó de plagio a Givenchy por su vestido de novia, hoy le ha llegado el turno a Roland Mouret. La esposa del príncipe Harry ha recuperado a la marca que la vistió la noche antes de su enlace con el nieto de la reina Isabel, en su última imagen de soltera.
Para su segunda jornada en Dublín, la exactriz se ha decantado por un sugerente diseño en color topo que marcaba su espectacular figura. Se trata de un modelo de manga larga, cuello a la caja y falda asimétrica a media pierna cuyo precio supera los 1500 euros. La Duquesa lo ha combinado con zapatos de terciopelo negro y bolso de Fendi de más de 3800 euros. Llama la atención que mientras su cuñada se decanta por accesorios de pequeño tamaño, Meghan los prefiere más grandes. Al igual que a su llegada al país, la exactriz ha llevado el pelo recogido, pero no en un moño de tipo ‘messy’, y ha lucido unos pendientes en forma de copos de nieve de diamantes y oro blanco de la firma Birks que estrenó dos días antes de su boda.
Meghan ha combinado su look con complementos en negro / Gtres
Un divertido momento
Los Duques han protagonizado una entrañable anécdota durante su primer acto de la jornada. Meghan y Harry han podido conocer a las mascotas del Presidente, Michael Higgins. Se trata de dos perros de raza boyero de Berna, Shadow and Brod, que han hecho las delicias de la esposa de Harry, quien es una gran amante de los animales. De hecho, Meghan se ha traído desde Canadá a uno de sus perros y estuvo un tanto apenada porque el otro tuvo que quedarse en Toronto porque era muy mayor para viajar.