Las ciudades donde se forjó el amor del rey Juan Carlos y Marta Gayá
Corrían los años 90 cuando el Rey Juan Carlos conoció a Marta Gayá. Una guapa mallorquina, unos años más joven que él, que consiguió hacerse con su atención y, también, con un hueco en su corazón. Una relación amorosa ya extinta que, con el paso de los años, ha dado lugar a una buena amistad que todavía sigue vigente.
Sin embargo, en aquellos años la pareja vivió un pasional romance que se gestó en algunos de los lugares más bellos de Europa. La ciudad de Palma de Mallorca tuvo un protagonismo especial y es que fue precisamente ahí, en el Club Naútico mallorquín, donde se vieron en público por primera vez. Un encuentro en el que también estuvo presente la reina Sofía. La madre de Felipe VI fue testigo de primera mano de cómo su marido se levantaba a saludar a Gayá y el resto de los comensales, algo inusual en el monarca.
Las aguas que rodean a la isla mediterránea eran otro de los destinos favoritos del Rey y su amante. El Fortuna, el yate de don Juan Carlos, también fue testigo de su pasión. Fueron vistos a bordo de esta embarcación, desde la cual pasaban a otras para disfrutar de una mayor discreción.
Don Juan Carlos y doña Sofía durante sus vacaciones en Palma de Mallorca en 2002 / Gtres
A pesar de que parecían encontrarse muy a gusto en Mallorca, el Rey y Marca Gayá también hicieron viajes al extranjero. Uno de los más conocidos es el que hicieron en 1992 a la ciudad francesa de Saint-Moritz, pues el ya ex presidente Felipe González tuvo que reconocer que el rey no estaba en España y, para salir del paso, explicó que se encontraba haciéndose un chequeo médico en Suiza. Precisamente Suiza se convirtió en uno de sus destinos favoritos y donde vivieron algunos de sus mejores momentos juntos.
Marta Gayá en una imagen de archivo / LOOK
La capital del amor, París, la suiza Gstaad y multitud de casas de amistades y cenas privadas fueron los escenarios complementarios de este romance. Una historia intensa que duró desde finales de los años 80 hasta finales de 2003 y que ahora recuperamos gracias a las grabaciones inéditas a las que ha tenido acceso OKDIARIO.