El divertido plan rural de la Reina Sofía mientras los Reyes estaban en el Vaticano
La Reina Sofía no acudió al funeral del Papa Francisco
En su lugar estuvo en una feria cerca de Zarzuela
La Reina Sofía se convirtió en una de las grandes ausentes al funeral del Papa Francisco en Roma. Solamente don Felipe y doña Letizia, acompañados de algunos miembros del Gobierno, se trasladaron hasta el Vaticano para dar el último adiós al Pontífice, en una ceremonia en la que también estuvieron presentes otros mandatarios internacionales y representantes de casas reales. Entre ellos, por ejemplo, los reyes de los belgas, los reyes de Jordania, los príncipes herederos de Noruega o la reina Mary de Dinamarca.
Doña Sofía no fue la única reina madre que no asistió a las exequias, sino que en esta ocasión tampoco lo hizo la reina Margarita de Dinamarca, que ha reducido su agenda de manera considerable desde que abdicara en su hijo mayor, el actual rey Federico X.
Aunque la madre del Rey Felipe VI no estuvo en Roma durante el funeral del Pontífice, doña Sofía sí que se ha dejado ver en público a lo largo del fin de semana. La abuela de la princesa de Asturias y de la infanta Sofía aprovechó para disfrutar de un divertido plan en Madrid.
La Reina Sofía acudió al Salón Internacional del Campo (SICampo) que se ha celebrado en el Hipódromo de la Zarzuela, muy cerca de su residencia oficial. Esta cita tenía por objetivo impulsar el sector primario y el cuidado del medio ambiente, una cuestión con la que la madre del monarca está muy implicada. De hecho, participa en numerosas iniciativas a través de la Fundación Reina Sofía en las que se pone el foco en la naturaleza y la protección del entorno y de los animales.
Durante su visita, doña Sofía recibió el premio SICampo 2025 por su constante apoyo al mundo rural. Al mismo tiempo aprovechó para ser testigo de la presentación del Festival Internacional del Burro de Rociana del Condado en SICampo. Allí, la Reina Sofía saludó a la burrita Leonor, a la que se ha puesto este nombre en honor de la princesa de Asturias. Esta burrita se hizo muy popular durante la pandemia. El nombre de Leonor fue elegido por un grupo de sanitarios madrileños que visitó el Bosque Hospital de Hinojos-Doñana para buscar terapias de relajación con este tipo de animales.
Fue la asociación Burrito Feliz la que le presentó a la burrita a doña Sofía, al tiempo que le explicó cómo fue su llegada a la organización, poco después de la muerte del niño al que apoyaba. Desde entonces, la burrita se ha convertido en una figura fundamental para diferentes terapias.
Amor por los animales y la naturaleza
La pasión de la Reina Sofía por el medio ambiente y los animales es algo de sobra conocido, que le viene a la madre del Rey Felipe VI desde lejos, desde su infancia. La abuela de la princesa de Asturias siente verdadera pasión por los animales y los burritos ocupan un lugar especial porque en su país natal, estos animales siguen siendo muy importantes. De hecho, hace algunos años pudimos verla en una visita a Grecia a lomos de un burrito y en un viaje a Córdoba se encargó de bautizar a otro y de hacer una llamada de atención sobre los peligros que acechan a estos animales.