La princesa Leonor homenajea a Armani y deslumbra con chaqueta metalizada y pantalón palazzo en Oviedo
La princesa Leonor brilló en el Concierto previo a los Premios Princesa de Asturias 2025
El concierto se celebró en el Auditorio Príncipe Felipe de Oviedo
Leonor brilló con su estilismo, que combinó modernidad y sobriedad

La princesa Leonor vivió una de las veladas más simbólicas del año en su tierra asturiana con motivo del Concierto previo a los Premios Princesa de Asturias 2025, un acto que, más allá de su carácter cultural, representa también un momento de enorme significado personal y público para la heredera al trono. A sus diecinueve años recién cumplidos, Leonor consolida su papel institucional con una madurez y serenidad que cada vez cautivan más al público. Oviedo, ciudad que la vio nacer y que cada otoño se convierte en epicentro del reconocimiento al talento y la excelencia, volvió a recibirla con entusiasmo.
El Auditorio Palacio de Congresos Príncipe Felipe se llenó de solemnidad, emoción y elegancia para acoger una nueva edición de este concierto organizado por la Fundación Princesa de Asturias, que sirve como antesala a la gran ceremonia de entrega de los galardones. Bajo la presidencia de los Reyes, y acompañada por su hermana, la infanta Sofía, la princesa vivió una noche en la que la música volvió a ser protagonista, reforzando el vínculo entre la cultura y los valores que los premios representan: la cooperación, la superación y el compromiso con la sociedad.

La princesa Leonor y el Rey Felipe VI en Oviedo. (Foto: Gtres)
Leonor acaparó todas las miradas desde su llegada al auditorio, no solo por su papel institucional, sino también por su look, que reflejó su evolución personal y su creciente madurez estilística. La princesa optó por unos pantalones palazzo que ha combinado con una chaqueta con hilo metalizado. Una combinación perfecta entre juventud y sobriedad, entre modernidad y tradición. El tono azul noche elegido aportaba serenidad y frescura, mientras que el corte del vestido realzaba la figura esbelta y la postura elegante de la Princesa.
Los complementos, seleccionados con discreción, completaban un conjunto equilibrado y coherente. Leonor optó por unos zapatos de salón y una cartera de mano de terciopelo, ambos en perfecta armonía con el color y la textura del vestido. En cuanto a las joyas, se decantó por unos pendientes sencillos pero con un toque de brillo que aportó luz al rostro. El maquillaje potenció la naturalidad que caracteriza a la heredera, mientras que su peinado, un semirrecogido con ondas, enmarcó sus facciones con un aire juvenil y elegante.




La princesa Leonor y el Rey Felipe VI en Oviedo. (Foto: Gtres)
Más allá de la moda, el estilo de Leonor transmitió un mensaje claro: el de una nueva generación que combina la sobriedad de la tradición con una sensibilidad contemporánea. Cada una de sus apariciones públicas revela una evolución constante, en la que la princesa de Asturias logra proyectar cercanía, responsabilidad y elegancia sin artificios.
El ambiente del auditorio reforzó esa imagen de solemnidad y emoción. Entre los asistentes se encontraban numerosas autoridades, representantes del mundo cultural y premiados en anteriores ediciones, que no quisieron perderse este concierto previo a una ceremonia que cada año gana mayor proyección internacional. La velada estuvo marcada por interpretaciones musicales que rindieron homenaje a la creatividad y al espíritu humanista de los Premios. Esta cita, que da inicio al programa oficial de los Premios Princesa de Asturias 2025, es también un símbolo del compromiso de la Familia Real con la cultura y la excelencia. En esta edición, los galardones reconocen a figuras de gran relevancia internacional, entre ellas el filósofo Byung-Chul Han, el escritor Eduardo Mendoza, la fotógrafa mexicana Graciela Iturbide y la deportista Serena Williams, ejemplos de talento, esfuerzo y vocación universal.