Harry se sincera tras su encuentro con Carlos III: "El año que viene tendré que centrarme en mi padre"
El príncipe Harry visitó Ucrania tras su breve encuentro con el rey Carlos III
De momento no se tienen detalles concretos sobre cuáles van a ser los próximos pasos de la familia real
El príncipe Harry ha roto su silencio tras el breve encuentro que mantuvo hace unos días con su padre en Clarence House. Esperábamos que el duque de Sussex, tal como ha hecho en otras ocasiones, hablara de su reunión con el monarca, pero esta vez ha sido más discreto y comedido. Probablemente porque no es su intención intensificar las tensiones con los Windsor, sino todo lo contrario.
Después de volver a casa y tras su paso por Ucrania, el hermano del príncipe de Gales se ha pronunciado sobre el viaje a Londres y la audiencia que le concedió el rey en su residencia. Lo ha hecho en una entrevista que un conocido diario británico británico ha publicado el mismo día en el que ha cumplido 41 años.
Un diario que ha seguido los pasos del duque de Sussex en su visita al país de Zelenski, donde fue invitado por una organización que proporciona prótesis y pone en marcha programas de rehabilitación a soldados y civiles heridos en el conflicto bélico. Una iniciativa que está muy en línea con el trabajo de la Fundación Invictus Games. De hecho, el objetivo de la visita del hijo menor del rey Carlos III a Ucrania ha sido, precisamente, promocionar los Juegos Invictus en el país.
A pesar de su salida de la estructura principal de la familia real, Harry sigue vinculado a algunas iniciativas, entre las que destaca la Fundación Invictus Games. Una cuestión con la que el duque de Sussex está muy volcado y a la que dedica gran parte de su tiempo. Precisamente por eso, el viaje a Ucrania se ha convertido en el escenario perfecto para promocionar el trabajo de la organización aprovechando el protagonismo tras el encuentro con su padre.
El periódico The Guardian ha sido el escogido por el príncipe para este reportaje en el que no han faltado las declaraciones sobre su vida lejos de la corte del rey Carlos III y alguna referencia al encuentro con su padre. Una de las periodistas del medio ha hecho el viaje junto al duque de Sussex, que ha contado que le gusta el boxeo porque le ayuda a lidiar con el estrés.
Un Harry que se ha mostrado como le hemos visto en otras ocasiones, alegre y divertido, pero sin perder el foco en lo que le preocupa. La situación de Ucrania es algo que tiene muy presente, sobre todo, la de los soldados que luchan allí, porque de alguna manera se acuerda de la época en la que él mismo estaba en el ejército.
Pendiente de su padre
Ha sido durante el viaje de regreso donde el duque de Sussex se ha sincerado de una manera más abierta. El príncipe ha hablado sobre su complicada relación con parte de la prensa británica, con la que ha llegado incluso a los tribunales. Según ha contado, los medios dan una imagen distorsionada de él, pero en realidad él siente el apoyo y el cariño de la gente.
Harry ha comentado que entiende que para algunos sectores haya resultado incómodo que se haya animado a contar su historia tanto en documentales como en sus memorias, pero es algo de lo que no se arrepiente: «Sé que molesta a algunas personas, pero tengo la conciencia tranquila», ha dicho el príncipe, que ha confesado que le gustaría poder llevar algún día de vuelta a sus hijos al Reino Unido. Sin embargo, por ahora sigue pendiente el tema de la seguridad.
Sobre la relación con su padre, Harry no ha querido desvelar detalles concretos sobre su encuentro, pero sí que ha dicho que el año que viene tendrá que centrarse más en él. Algo que ha hecho saltar las alarmas sobre la salud del monarca, sobre todo, porque todavía está en tratamiento para el cáncer que padece desde 2024.
Aunque tampoco ha hablado sobre su mujer, sí que ha dicho que ella le dio un consejo que ella le dio y que tiene siempre muy presente. Tal como ha explicado, Meghan Markle le dijo que se ciñera a la verdad, y así lo ha hecho tanto en su libro como en otras ocasiones.
En general, el duque de Sussex ha dejado claro que está satisfecho con la vida que lleva y es feliz, aunque le guste el Reino Unido y siempre le vaya a gustar. Eso sí, parece que ahora mismo un regreso más permanente no está en su hoja de ruta.
Quizás porque la situación con su hermano sigue siendo tensa. Algunas fuentes aseguran que el príncipe de Gales no tiene intención de arreglar las cosas con su hermano y pone todo tipo de trabas a cualquier idea del rey Carlos III de abrirle los brazos a su hijo menor. Un escenario que no tiene visos de cambiar en el corto plazo, sobre todo porque, a efectos prácticos, Guillermo se ha convertido en la figura más importante de la institución. Un muro contra el que luchar parece más que complicado porque para muchos, el heredero solamente es capaz de ver en Harry una fuente constante de problemas.