El Rey eclipsa a Letizia en Sevilla con una peculiar elección de estilo
Los reyes don Felipe y doña Letizia han iniciado la tercera etapa de su gira por las distintas autonomías una vez finalizado el estado de alarma. Una gira que tiene por objetivo conocer la situación en cada una de las zonas, así como apoyar la recuperación económica. Si la pasada semana Sus Majestades visitaron las islas Canarias y las Baleares, hoy le ha llegado el turno a Andalucía, concretamente a Córdoba y Sevilla.
En torno a las 11:00 de la mañana, don Felipe y doña Letizia llegaban al Polígono Sur, una de las zonas más pobres no solo de la capital andaluza, sino también de toda España. Está zona también es conocida como las Tres Mil viviendas y en ella viven 50.000 personas en un alto índices de marginalidad y peligrosidad. Sus Majestades han recorrido el Centro Cívico El Esqueleto y la sede de la Fundación Don Bosco en la que ha sido su primera visita a esta zona desde que se convirtieran en reyes. Don Felipe ya la visitó en 2003, antes de su compromiso con la entonces periodista. Los Reyes han sido recibidos entre vítores y pancartas de apoyo por los vecinos, que se han mostrado encantados con esta visita.
Para esta ocasión, la Reina ha vuelto a apostar por el que parece que se ha convertido en su peinado preferido. Una alta cola de caballo que deja su rostro despejado y que resulta perfecta para combatir el calor. Doña Letizia ha estrenado un favorecedor vestido de escote halter, largo midi y con cintas bajo el pecho. Un diseño en estampado tiza en tonos azules de Adolfo Domínguez, una de sus firmas preferidas, cuyo precio es de 99 euros en temporada de rebajas, frente a los 224 originales. La Reina lo ha combinado con unas nuevas alpargatas de Macarena Shoes en color nude y anudadas al tobillo. Como joyas, su inseparable anillo de Karen Hallam y los pendientes de aro en forma de bambú que comparte con la princesa Leonor.
Sin embargo, en esta ocasión, quien más ha llamado la atención por su estilismo es el Rey. Acostumbrados a verle con traje o con looks casuales de camisa de corte clásico y pantalón, esta vez, don Felipe ha sorprendido decantándose por una guayabera en color azul. Se trata de una de las prendas que llevó en el último viaje de Sus Majestades a Cuba. Confeccionada en algodón o lino, la guayabera en una camisa de estilo informal que cuenta con cuatro bolsillos frontales que se encuentran decorados con jaretas, así como largos faldones que se llevan sueltos sobre el pantalón. Se popularizó especialmente en el siglo XIX y sus orígenes se disputan entre Cuba y Filipinas, ambos países colonias españolas.
En la cultura popular se habla de la historia de un campesino que le encargó a su mujer una camisa fresca y cómoda, con bolsillos para que pudiera guardar diversos utensilios, aunque también se cuenta que la idea podría proceder de un inmigrante español. Sea como fuere, la prenda se asocia a los que trabajaban en la recolección de guayabas y se popularizó entre los campesinos cubanos y los militares.
En torno a las 12:30 horas, Sus Majestades se han trasladado hasta el centro de la ciudad para dar un paseo desde la Catedral y los Reales Alcázares. Un recorrido que ha recordado a una de las fechas más importantes para el clan Borbón, ya que fue precisamente allí donde hace veinticinco años contrajo matrimonio la infanta Elena con Jaime de Marichalar.